Era segundo de Abel Resino y en muchas ocasiones había dejado patente su deseo de entrenar al Betis, pero el destino terminó llevando en diciembre a Juan Sabas, otrora goleador verdiblanco, al Extremadura.
En el equipo de Almendralejo ha dejado unas imágenes muy curiosas este pasado fin de semana, tras doblegar al Marbella y dejar los puestos de descenso a cuatro puntos.
Al terminar el encuentro, Sabas se fue directo hacia las gradas del Francisco de la Era, donde había presentes 7.000 espectadores, para celebrar el triunfo y ser acogido como un auténtico héroe.