Antonio
Cordón está trabajando
rápido y aparentemente
bien en esta larguísima ventana de transferencias que morirá allá por los albores de
septiembre. Ni siquiera había arrancado el verano (que se estrena oficialmente este lunes 21 de junio) cuando el director general deportivo del
Real Betis había cerrado ya tres fichajes (todos a
coste cero) y otras tantas ampliaciones de contrato y renovaciones, firmando a un portero (
Rui Silva), un carrilero polivalente (
Sabaly) y al también lateral zurdo
Miranda en propiedad, amén de atar la continuidad de
Joaquín, Víctor Ruiz y Aitor Ruibal. El extremeño ha cubierto la marcha de
Emerson al Barcelona, por lo que solamente le queda hacer lo propio con la de
Mandi (gratis) al Villarreal.
Después, lo lógico es que llegue un
parón en este mercado tan condicionado de nuevo por la
pandemia, pero este año también por la disputa de varios torneos importantes:
Eurocopa (absoluta y sub 21),
Copa América, Juegos Olímpicos, Copa de Oro... Por otro lado, como suele ocurrir, hará falta que la '
operación salida' tome velocidad de crucero para que haya
huecos y, quizás, una
plusvalía con la que rearmar un plantel que afrontará
tres competiciones en la
21/22 y que aspira a conservar de nuevo a sus mejores hombres, ante la imposibilidad, incluso aunque alguno saliera, de realizar los grandes
desembolsos de antaño. Y es que la autarquía y la restricción presupuestaria se prolongará, como poco, hasta 2023, lo justo para que la economía, en general, y el fútbol, en particular, se recuperen un poco del mazazo de la
Covid.
Cordón necesita aliviar un poco la carga de los que
no cuentan o contarán menos para
Pellegrini, señalados en privado y negados muchas veces en público para no devaluar el producto. A saber:
Joel, Dani Martín, Sidnei, Álex Moreno, Juanmi, Tello, Loren, Edgar... Si
Montoya y Paul encuentran acomodo también, el segundo cedido como el meta asturiano, bienvenido sería.
William Carvalho, en los planes del entrenador, está situado en la rampa por su escaso rendimiento y ser el segundo mejor pagado. No se desea un grupo excesivamente corto, aunque sí con efectivos que sean habituales y estén todos 'enchufados' para ser complementados con los canteranos que más aprieten: el retornado
Rober, Raúl García, un
Rodri que busca asentarse,
Fran Delgado, Calderón, Marchena...
El plan es quedarse con
Guido Rodríguez, Canales y Fekir, la columna vertebral del Betis, salvo oferta
fuera de mercado, pero, si bien habrá que esperar a las salidas para determinar qué posiciones reforzar a partir de la llegada del primer central, se trabaja en la secretaría técnica con el escenario de que deberán ser, al menos,
dos los refuerzos para el
eje de la retaguardia. Sidnei, con un interés tibio del
Inter de Porto Alegre por repatriarle, tiene los dos pies fuera de Heliópolis, si bien apurará a la espera de buenas propuestas en Europa o una rescisión amistosa y postrera que aumente sus opciones de encontrar destino. Por
Bartra se escuchan ofertas, aunque lo más probable es que se quede, dados su alta ficha y su escaso mercado, junto con Víctor Ruiz y los dos que lleguen.
Bien es sabido que Cordón, después de un par de reuniones de la comisión deportiva, tiene sobre su mesa ya una 'short list' de centrales, conformada por
Balbuena, Luiz Felipe y un tercero que no ha trascendido por el momento. El paraguayo y el italo-brasileño están dilatando su decisión, otro aspecto lógico en la actual tesitura, a la espera de la mejor vía para continuar con su carrera. El ex del West Ham, donde coincidió y destacó a las órdenes de Pellegrini, disputa actualmente la Copa América y desea mantenerse en una de las cinco Grandes Ligas, pese a que lo mejor (económicamente hablando) que le ha llegado fue de
Rusia y un país árabe. El Betis realizó su planteamiento, más cercano al que rechazó Mandi (
1,5 millones de euros netos) que a sus pretensiones (
2,5 y 4 como prima de fichaje), adornándola con pluses por objetivos y, si acaso, algún año más de contrato. De ahí no se moverá, por lo que la pelota está en el tejado del guaraní.
La propuesta al zaguero de la
Lazio es similar, pero a éste le queda una campaña más de vinculación con los romanos, que le han propuesto
ampliar hasta 2025 o 2026 con una mejora sustancial de los emolumentos, que igualarían lo que le dan en La Palmera. Luiz Felipe medita si apostar por lo que conoce, tras una charla con el nuevo entrenador,
Sarri, que medio le asegura la titularidad formando pareja con
Acerbi, o forzar una salida y emprender una nueva
aventura. El Betis sentó igualmente las bases y espera una respuesta, en ambos casos con un cierto margen para los interesados, aunque no se quedará de brazos cruzados. De hecho, ha activado los contactos con el tercero en discordia, un nombre que se mantiene en secreto pero con el que se negocia paralelamente.
Algunas fuentes apuntan a que este 'tapado' podría ser
Shkodran Mustafi (29), libre tras su paso por el descendido
Schalke 04, donde tuvo una discreta participación. No está en su mejor momento el
alemán de origen albanés, si bien Pellegrini lo conoce de su paso por LaLiga (
Valencia) y la Premier (
Arsenal), por lo que sabe lo que puede ofrecer. En realidad, no es el central
expeditivo y con manejo del
juego aéreo que se pretende, aunque tampoco estrictamente hablando responde a esa definición Luiz Felipe, que destaca más por la salida limpia de balón y la anticipación. Según comentan a ESTADIO Deportivo fuentes solventes en verdiblanco, los tiros no irían por el de Bad Hersfeld, si bien desde su entorno se filtra que ha habido, como poco, un contacto para conocer
pretensiones y disponibilidad.
Tampoco serán los elegidos, salvo giro mayúsculo, los ofrecidos
Romain Saïss y Fede Fernández, que no terminan contrato, sino que tienen un año más de retención por parte de
Wolverhampton y Newcastle, respectivamente, lo que encarecería las operaciones. Además, el franco-marroquí tiene un sueldo inasumible, mientras que el italo-argentino no está entre las preferencias de los técnicos heliopolitanos. Tampoco otros relacionados en diferentes ámbitos con la entidad del Benito Villamarín, como
Jemerson (Corinthians). Se busca alguien más
contrastado, con bagaje en las principales Ligas europeas y, si es posible, en competiciones continentales, con agresividad y personalidad como características más definitorias.