El final de la temporada 2018 supuso el adiós de
Zidane al Real Madrid tras ganar su tercera
Champions seguida y el inicio de la búsqueda del equipo blanco de un nuevo entrenador. El conjunto madridista inició entonces un casting que llevó hasta
Julen Lopetegui, previa polémica con la
Federación, pues era el entrenador de la selección española. Pero antes de decidirse por el hoy entrenador del
Sevilla, los madrileños contactaron con más técnicos, entre ellos
Julian Nagelsmann, que también fue vinculado al
Sevilla por su trabajo en el Hoffenheim.
Ahora ha sido el propio
Nagelsmann el que ha explicado su 'no' al
Real Madrid. Es normal que si el
Real Madrid te llama, lo piensas. Al principio me sorprendió, lo sopesé y no me sentía cómodo con la decisión de ir allí. Quiero mejorar y si vas al
Real Madrid inmediatamente, no hay tiempo para mejorar como entrenador. No tienes la oportunidad de llegar a ser mejor ya tienes que ser el mejor. Ahora mismo no soy el mejor, pero admito que quiero ser uno de los mejores en el futuro. Si vas al
Real Madrid o al Barcelona, los aficionados, los medios de comunicación y los que toman las decisiones no te dan tiempo para convertirte en eso".
Nagelsmann reconoce que la presión es diferente y también es necesario un periodo de endurecimiento para convivir con ella. "Solo quieren ganar cada partido, títulos, ganar la
Liga de Campeones... Si no ganas, no puedes argumentar que todavía eres joven y que estás en desarrollo. En el mundo del fútbol no es fácil planear una carrera, porque es muy impredecible, pero tienes que intentarlo", subraya el hoy entrenador del
Leipzig en
The Independent, equipo con el que compite con el
Bayern por la
Bundesliga.
Para
Nagelsmann, el
Madrid llegaba muy pronto. "Lo principal es dar los pasos correctos, no los pasos más grandes. El
Real Madrid es probablemente uno de los pasos más altos que se pueden dar, así que pensé, ¿cumples 31 años, vas al
Real y desde allí a dónde?", indicó.
Además, reconoció que había una barrera más: "Es muy importante para mí. Me gusta comunicarme, soy muy expresivo con mis jugadores. Todavía no puedo hablar español, solo sé decir ‘hola, qué tal’. Así que hubiera sido el paso más importante, pero no el correcto".
El
Real Madrid también intentó la contratación de
Pochettino y sondeó a
Allegri, pero ambos tenían contrato en vigor. Finalmente escogió a Lopetegui, que fue destituido prematuramente en un año que ni
Solari ni Zidane lograron enderezar.
El verano siguiente
Monchi llamó a la puerta del exseleccionador superando todas las reticencias que levantaba su fichaje entre la afición y apostando por el técnico vasco para el primer proyecto de su segunda etapa en
Nervión.