Una carrera ha hecho falta para que los críticos de
Carlos Sainz vuelvan a salir a la palestra. El segundo lugar en el
Gran Premio de Baréin del piloto español, sólo por detrás de su compañero de equipo en
Ferrari,
Charles Leclerc, ha servido para que muchos argumenten de que
Sainz no estará al nivel del de
Mónaco en la disputa por el campeonato del mundo de pilotos de la
Fórmula 1, en el que los dos pilotos de la escudería italiana parten como favoritos junto a
Max Verstappen y
Sergio Pérez, de
Red Bull, y
Lewis Hamilton y George
Russell, de
Mercedes.
No es muy entendible que vuelvan a aflorar la dudas sobre
Carlos Sainz cuando el madrileño quedó la temporada pasada en la clasificación final por delante de
Leclerc después de mostrar una consistencia y ritmo muy fiables. Tampoco se comprende demasiado que surjan estas incógnitas cuando tras un fin de semana perfecto de
Leclerc y uno problemático de
Sainz, el español ha sido segundo con solvencia, demostrando así su regularidad y seguridad, algo muy importante para cualquier escudería de
Fórmula 1.
Este ambiente no le es ajeno a
Carlos Sainz. Ha crecido y vivido siempre con el estigma de ser el hijo del gran
Carlos Sainz, doble campeón del
WRC y vencedor del
Dakar, y no son pocas veces las que ha callado la boca, lo cual no hay dudas que volverá a hacer. Porque
Carlos Sainz este año ganará su primera carrera en la
Fórmula 1, a la primera oportunidad que ha tenido un coche ganador y también luchará por ser el segundo campeón del mundo de la máxima categoría del automovilismo tras
Fernando Alonso. Su nivel de pilotaje y su mejora continua son el mejor aval para que
Carlos Sainz silencie los críticos que siempre atacan al madrileño a le menor oportunidad que tienen.
Todas las veces que Carlos Sainz silenció a sus críticos en la Fórmula 1
Entre 2015 y 2017, sus primeros año en la F1,
Carlos Sainz fue un piloto que fue mejorando con el paso de los años. Primero le dio guerra a
Max Verstappen, su compañero de equipo en
Toro Rosso, posteriormente le ganó la partida a
Daniil Kvyat. Su gran rendimiento hizo que
Renault F1 le fichara. El año 2018, fue su peor año respecto a su compañero de equipo, ya que
Nico Hulkenberg le superó en
Renault. Aún así,
Mclaren F1 confió en
Carlos Sainz y le dio un asiento junto a
Lando Norris, al cual arrasó en 2019 y al que derrotó en 2020. Por último, llegamos a 2021 en su primer año en
Ferrari donde
Carlos superó a
Charles Leclerc gracias a su regularidad y consistencia.