Estadio Deportivo4 min lecturaBurgos, 26 jun (EFE).- El San Pablo de Burgos ha hecho honor a su nombre este viernes y, con su histórica clasificación para las semifinales de la Liga ACB, 'ha llegado y ha besado el santo' en una competición que le consideraba como una de las cenicientas, pero que ahora la reconoce como digna aspirante al título.
No será fácil que Burgos siga con su racha de triunfos ante tres de los más elevados presupuestos de la categoría, los del Fútbol Club Barcelona, Valencia Basket y Kirobet Baskonia. Pero, de momento, ya ha dejado su sello con la eliminación del otro histórico y dominador de las últimas temporadas, el Real Madrid de Pablo Laso.
En su primera participación en una fase final de la Liga ACB, Burgos ha alcanzado unas semifinales con las que parece mostrar que no tiene techo y puede poner el broche de oro a una temporada perfecta.
"Más lejos que nunca", era el eslogan del club burgalés está temporada, en un mes de julio que sirvió para iniciar una campaña de abonados que aventuraba una temporada especial, con la llegada a las competiciones europeas del conjunto burgalés.
Nadie en Burgos pensaba que realmente el equipo llegaría 'más lejos que nunca', pero lo ha hecho... hasta semifinales.
"Lo hemos conseguido", ha afirmado el presidente del San Pablo Burgos, Félix Sancho, en declaraciones a Efe tras vivir con emoción la victoria de Valencia sobre Gran Canaria, que ha certificado la clasificación burgalesa tras haber derrotado antes a Andorra, en un emocionante partido en el que el conjunto dirigido por Joan Peñarroya ha remontado hasta 16 puntos para ganar por 88-86 en un apretado final.
El dirigente del club ha destacado que todo ha salido "a pedir de boca" en una temporada ya histórica para este club novato en la Liga ACB, con solo tres años en sus entresijos.
Ahora espera el Barça, un rival al que el presidente ha calificado como "muy superior y que tiene 10 veces más de presupuesto, 2 días de descanso y una plantilla más larga".
Pero el máximo dirigente del club burgalés ha apelado "al corazón y la fe que mueven montañas" para llevarse la semifinales el domingo a las cinco de la tarde y poder disfrutar el martes de la gran final.
La otra eliminatoria se medirán el anfitrión de esta atípica fase final, el Valencia Basket, y el Kirolbet Baskonia.
El club burgalés se estrena en una fase final, lo que le convertía en la cenicienta de un grupo donde parecía que no cabían las sorpresas. Sin embargo el equipo dirigido por Joan Peñarroya ya dio la primera campanada del torneo venciendo al Real Madrid en la segunda jornada, lo que permitió soñar a los burgaleses.
Una victoria que fue muy sufrida como todas en esta fase final, en la que el San Pablo no ha perdido ningún partido por más de cuatro puntos y en la que ha tenido que remontar varios de sus encuentros, como el de este viernes ante Andorra.
"Si esto no es lo cuentan a principio de temporada nos llamarían locos", ha apostillado Félix Sancho, quien ha añadido que "una vez llegados hasta aquí hay que aprovechar la oportunidad como sea hasta el último momento". EFE
1011865
vfr-orv/apa