Han transcurrido casi 80 años desde que Manuel Sánchez, conocido como ´Chico Charlot´, anotase el primer tanto sevillista en Primera. Un pionero que dio paso a una larga lista de goleadores en la que muchos han escrito su nombre con letras de oro, al instaurar las siempre recordadas cifras redondas.
Pepe Herrera, Juan Arza, Paco Gallego, César, Rafa Paz, Kanouté... y Carlos Bacca. El colombiano entró ayer en la historia nervionense al conseguir el gol 3.500 en la máxima categoría. Un honor que le hacía mostrar su felicidad.
"Me lo dijeron mis compañeros y estoy muy contento de entrar en la historia del Sevilla. Vine a aportar mi granito y a dejar huella, y es un orgullo", explicó el delantero, que elogió la figura del malí, autor del tanto número 3.000: "Kanouté es un gran jugador y una gran persona. Pude conocerle en persona hace unos días y es un referente, no sólo para mí y el sevillismo, sino para el mundo del fútbol".
Con la diana anotada ayer, además, Bacca suma ya cinco y sigue siendo el ´pichichi´ sevillista en Liga. Incluso gozó de una inmejorable ocasión para ampliar su cuenta, pero falló su primer penalti como blanquirrojo.