1. Emery apostó por un sistema trabajado, dinámico y rico, y mejoró al equipo con cada cambio. Además, el
Sevilla recuperó la intensidad. Sin ésta, se vulgariza.
2. A nadie le sorprende la calidad de
Reyes. Lo extraño es que la muestre con regularidad. Si promete mantener el nivel, que le renueven.
3.
Banega no es bueno de mediapunta, aunque sí lo es llegando con balón a las posiciones del mediapunta. Como talentoso, es irregular, pero nadie la saca como él.
4. Siempre que marca
Bacca, el Sevilla gana el partido, pero apenas suma puntos si el cafetero no moja. Ya se sabe, o Bacca o muerte.
5.
Gameiro es un perfecto suplente para Emery. No sólo porque siempre lo da todo, aun saliendo cinco minutos, sino también porque nunca protesta. Un crack.
6. Que
Aleix acabase esta campaña de lateral derecho habiendo tres en el plantel hablaría mal de la planificación. Por eso, no lo será. En el futuro, seguramente.
7. No es que
Deulofeu esté jugando mal ni aportando poco en defensa, es que sus cualidades, muy particulares, no se ajustan a lo que busca Emery. Ni más ni menos.
8. Si a alguien se le enciende la bombilla, vendrá ya a por
Krychowiak. Además de ser bueno, lo es siempre: durante los 90 minutos y en cada partido. Hay muy pocos pivotes en Europa como él.
9. Sin animación, el
Sánchez Pizjuán muta en un estadio cualquiera. También se puede ganar así, pero no se siente del mismo modo.
10. El
Granada no tiene mucho, pero sí bastante más de lo que está mostrando con Caparrós. Excesivos cambios en el once y demasiados jugadores fuera de sitio. Extraño.
Estadio Deportivo
