El 2019 arrancaba para el Betis
cargado de buenas expectativas, con el equipo clasificado para dieciseisavos de final de la Europa League como primero, en octavos de la Copa del Rey y sexto en LaLiga. Vivo en las tres competiciones y desplegando un gran fútbol. Pero, casi cuatro meses después, el panorama pinta muy diferente. Los de Setién apenas han sumado en todo este tiempo seis victorias en 24 partidos oficiales. Cayeron eliminados en Europa a las primeras de cambio ante un rival a priori de menor entidad; en la Copa del Rey, donde llegaron hasta las semifinales, fueron apeados por el Valencia tras desperdiciar en el partido de ida una ventaja de dos goles, y en el torneo doméstico, está fuera del objetivo,
a nueve de la sexta plaza y a tres de la séptima.
El Betis ha conseguido
sólo 17 puntos en los 16 jornadas de Liga disputadas en 2019, lo que supone un promedio de 1,06 puntos por partido, que en una Liga de 38 le daría a duras penas para los 40 que suelen garantizar la salvación. Y le convierten en el sexto peor equipo de LaLiga desde que comenzó el año en curso, el segundo si se tiene en cuenta sólo los últimos seis choques, en los que ha sumado cuatro derrotas, un triunfo y un empate.
Además, el actual Betis, que marcha noveno con 43 puntos,
ha perdido 12 con respecto a la temporada anterior, en la que acumulaba un total de 55 unidades en la jornada 33 de LaLiga.