Sólo queda una bala en la recámara. Y aunque la mente sevillista lleva tiempo en otros menesteres,
Emery anunció tras caer en
Cornellà que su equipo intentará evitar
"por orgullo" en
San Mamés, en la última jornada de Liga, completar el pobre registro de una temporada entera sin ganar fuera de casa Un talón de Aquiles que ha lastrado durante todo el curso a los blanquirrojos y que, pese a todo, no ha evitado que el conjunto de Nervión se haya asegurado la séptima plaza, que trae consigo un nuevo billete europeo al ser el
Barcelona y el propio
Sevilla los finalistas de
Copa.
De este modo, en Nervión pueden presumir de haber sellado su pasaporte continental por decimosegunda vez en las últimas 13 campañas (sólo pinchó en la 11/12), y de no vencer en la Catedral, se convertirían en el
segundo equipo en la historia que es capaz de clasificarse para competiciones europeas
sin ganar un partido lejos de casa, tras el
Athletic en la
75/76. Un hito que se sustenta, lógicamente, en la fortaleza del
Pizjuán, donde los de Unai suman 43 puntos, sólo tres menos que
Barça y
Madrid y dos que el
Atlético. Números que contrastan con su rendimiento a domicilio, con 9 empates y 9 derrotas que le dejan como segundo peor visitante. Del mismo modo, aquel Athletic de Iribar, Irureta o Villar tampoco ganó en todo el curso lejos de San Mamés, donde no perdió, y acabó quinto en una Liga de 18, ganándose una plaza en la
Copa de la UEFA.
También logró ir a Europa sin vencer lejos de su campo el Atlético un año antes, aunque fue sexto y jugó la Recopa como subcampeón de Copa, mientras que el Valencia protagonizó otro caso similar en la
61/62, si bien acabó séptimo y fue a la Copa de Ferias como defensor del título.