José Antonio Rivero4 min lecturaBelén Rueda (58 años) ha vuelto a ser invitada en 'El Hormiguero' para hablar sobre su último proyecto cinematográfico, 'La ermita'. La actriz, conocida por su destacada carrera en el mundo del cine y la televisión, suma un nuevo título a la extensa lista de películas de miedo en las que ha participado. En esta ocasión, Rueda se adentra en un drama sobrenatural en el papel de Carol, una falsa médium atormentada por su pasado. Sin embargo, durante la entrevista, ocurrió un momento inesperado que permitió a los espectadores conocer un episodio personal de la actriz que hasta ese momento no había compartido públicamente: su experiencia con un ictus.
La entrevista, conducida por el presentador Pablo Motos, quien además es un amigo cercano de la actriz, se convirtió en un espacio de confidencias y revelaciones. Durante el diálogo, Belén Rueda habló abiertamente sobre un evento que marcó un antes y un después en su vida: el ictus transitorio que sufrió.
"Hubo una época en la que estabas durmiendo unas tres o cuatro horas al día. No más. Hasta que el cuerpo te dio un aviso, uno muy serio. Creo que fue un ictus transitorio", reveló Pablo Motos. Este episodio de salud fue un susto grave y sorprendente para Belén Rueda, ya que en un principio pensó que se trataba de una lipotimia, que suele causar mareos y pérdida temporal de conciencia. Fue su hermana quien, al percatarse de la gravedad de la situación, llamó al médico.
Belén Rueda compartió una información vital que aprendió durante su experiencia con el ictus transitorio. "Hay tres cosas que te pueden salvar la vida: sonreír, llenar los carrillos de aire y cerrar los ojos e intentar tocarte la nariz. Depende de la zona de la cara que te tocas, es que está afectada una parte del cerebro u otra", explicó. Este conocimiento puede ser crucial para las personas que enfrentan situaciones similares.
Además, la actriz reveló que el estrés fue el desencadenante del ictus que sufrió. Los especialistas que la atendieron descubrieron que tenía un aneurisma. Sin embargo, Rueda tomó medidas para cuidar su salud y su bienestar. "Cuando pasan este tipo de cosas parece que estás peor, pero lo cierto es que no es así. Mi neurólogo me dijo que ahora estaba mejor que antes y es verdad", afirmó. Esta experiencia marcó un punto de inflexión en su vida, llevándola a reevaluar su rutina y a tomar precauciones adicionales.
A pesar del susto y la preocupación inicial, Belén Rueda no se retiró de la industria cinematográfica. Apenas un mes después del episodio del ictus transitorio, la actriz ya estaba rodando una película bajo la dirección de Daniel Calparsoro. Esto muestra su fortaleza y determinación para continuar trabajando en su pasión, el cine, a pesar de los desafíos que enfrentó en su camino.
La entrevista en 'El Hormiguero' permitió a Belén Rueda compartir una experiencia personal impactante, destacando la importancia de cuidar la salud, manejar el estrés y estar preparado para situaciones inesperadas. Su historia es un recordatorio de que incluso en momentos difíciles, con el apoyo adecuado y la actitud correcta, es posible superar obstáculos y seguir persiguiendo nuestros sueños.