Afronta el
Betis en
Zorrilla el compromiso más exigente en lo que va de curso. Un duelo ante un rival directo que cuenta por victorias los tres partidos disputados al calor de su afición, con siete goles a favor y tres en contra. Y es que, como los verdiblancos, en
Valladolid son conscientes de que buena parte de sus opciones de ascenso pasan por su propio estadio, de ahí su empeño en convertirlo en un fortín. Un objetivo que los de
Velázquez intentarán truncar, aunque las estadísticas no traigan consigo buenos presagios.
El balance general de los enfrentamientos entre uno y otro equipo son favorables a los heliopolitanos, con 33 victorias, 22 tablas y 23 derrotas en los 78 partidos disputados, pero los números ofrecen otra lectura cuando se ciñen exclusivamente a los choques jugados en
Segunda división, donde el cuadro bético nunca ha sido capaz de vencer en sus siete visitas a
Pucela.
Los tres primeros precedentes acabaron en empate, todos ellos a un gol, mientras que en los cuatro últimos siempre se impuso el cuadro castellano-leonés (tres veces por 1-0), sin que el conjunto de las trece barras lograse celebrar ni un sólo tanto.
Sin duda, una negativa estadística para un
Betis que afronta de este modo el reto de sumar su primer triunfo en la
Categoría de Plata en un feudo llamado a ser un fortín.