Las dos caras del Betis de Rubi

El golazo de falta que Sergio Canales metió ante el Valencia en el último minuto del tiempo de alargue llevó el delirio a las gradas del Benito Villamarín. Se repetía la historia de la última victoria ante el Celta (2-1). Y también, de algún modo, las vividas ante Leganés (2-1) y Levante (3-1). Al Betis de Rubi siempre le toca ir a remolque, pero demuestra entereza y una fe inquebrantable en sus virtudes para levantarse de la lona y golpear.

Suma 14 puntos como local
De ese modo, remontando, han llegado los cuatro triunfos verdiblancos en esta Liga, todos al calor del beticismo en el coliseo de La Palmera. Una elogiable reacción que también llegó ante Getafe y Eibar, aunque en esos casos se quedó a medias y sólo sirvió para sumar un punto tras sendos 1-1. En total, ha sumado 14 puntos, lo que convierte al Betis en uno de los mejores locales de LaLiga.

No en vano, sólo hay cuatro equipos que hayan sacado mejor rédito que los de Rubi en sus compromisos caseros hasta la fecha: Barcelona (18), Real Madrid (17), Athletic (16) y Atlético (15).

Al margen de esos cuatro clubes, todos ellos instalados en la parte alta de la clasificación, sólo igualan los guarismos del cuadro heliopolitano otros tres conjuntos: Levante, Alavés y Mallorca. Y aunque es cierto que los verdiblancos son, junto a los bermellones y el Leganés, los que más partidos han jugado ante su público, con un total de 8 de 14, no lo es menos el hecho fehaciente de que el Betis está construyendo en el Benito Villamarín un fortín que lo sostiene. Sólo el Valladolid, en la jornada inaugural, y el Sevilla, en el derbi, lograron llevarse todo el botín. Y en ambos fue capaz de igualar el 0-1, antes de recibir el segundo tanto.

Dos unidades a domicilio
Pero el problema llega cuando lo que ganas en casa te lo dejas cuando toca jugar fuera. Con sólo dos puntos sumados a domicilio, el cuadro verdiblanco iguala en este registro al Leganés, colista de LaLiga, y sólo es empeorado por el Mallorca, que no ha casado nada positivo lejos de su estadio.

Por ello, aunque es habitual que todos los equipos sumen más puntos como local que lejos de su domicilio, en el caso del Betis la distancia es demasiado importante, tanto, que es el segundo equipo que mayor diferencia presenta entre lo que gana ante su gente (14) y lo que rasca como visitante (2). En total, 12 puntos de diferencia, sólo inferior a los +14 que tiene el Mallorca.

El conjunto balear será, precisamente, el próximo rival de los pupilos de Rubi. Un equipo que lo basa todo en su rendimiento en Son Moix, donde ha firmado hasta la fecha cuatro victorias, acompañadas de dos empates y dos derrotas.

Sin duda, una importante prueba de fuego para comprobar si la plantilla bética da al fin el necesario paso al frente que acaben de disipar las dudas que acompañan al proyecto desde sus primeros pasos. Hasta la fecha, no conoce la victoria como visitante (también es uno de los tres equipos que han jugado menos partidos lejos de casa, con seis) y sólo ha sumado dos puntos, los de los empates a cero ante Osasuna y Real Madrid. En Palma afrontará el reto de estrenarse al fin fuera del Villamarín y no tener que vivir sólo de ese carácter indomable que muestra ante su fiel infantería.