Tsygankov, desaparecido

Ya no queda rastro del extremo que deslumbró la temporada pasada, llevando al Girona a luchar hasta el final por LaLiga EA Sports. El conjunto catalán, que logró clasificarse para la Champions League por primera vez en su historia, contó con Artem Dovbyk, su máximo goleador de la campaña anterior, como una de sus piezas fundamentales. Tras una temporada tan destacada, era lógico que el foco del fútbol se centrara en sus grandes estrellas, y en el mercado de fichajes se produjeron las salidas de tres jugadores clave: Aleix García, Savinho y Artem Dovbyk.

Con la marcha de estas figuras, todas las miradas se dirigieron hacia Viktor Tsygankov, un futbolista al que se esperaba que asumiera un rol protagonista en esta nueva temporada y que debía ser un líder tanto dentro como fuera del vestuario. Sin embargo, la realidad ha sido muy diferente. El extremo ucraniano comenzó la temporada con buenas sensaciones, anotando un gol y repartiendo una asistencia en la tercera jornada. No obstante, tras sufrir una lesión y una recaída que lo mantuvieron alejado de los terrenos de juego durante nueve jornadas de LaLiga, regresó en buena forma, asistiendo y marcando un gol frente a un duro Celta, lo que generó esperanzas renovadas en él.

Sin embargo, tras esos destellos de calidad, encadenó cinco jornadas desaparecido y, junto a su equipo, lleva nueve partidos sin conocer la victoria. Debido a su bajo rendimiento en el campo, Michel decidió sentarlo en la jornada 30. Al ser cuestionado sobre esta decisión, el técnico del conjunto catalán atribuyó la suplencia a molestias estomacales. Sin embargo, el pasado fin de semana, ante un Osasuna que venía de nueve jornadas sin sumar de tres en tres, Tsygankov volvió a mostrar su falta de forma. En un mal partido del Girona, se le vio incómodo sobre el césped, apenas tocó el balón y fue sustituido en el minuto 50, nuevamente debido a problemas estomacales, según informó el club.

No obstante, pocos creen que su bajada de rendimiento se deba únicamente a estos problemas físicos. Comienzan a surgir voces que se preguntan si el jugador realmente está centrado en el Girona o si ya tiene la mente puesta en una posible salida este verano.

Solo quedan siete jornadas y el ucraniano debe dar lo mejor de sí para ayudar a su equipo en estas finales que le quedan al conjunto dirigido por Michel para asegurarse de seguir en primera división la próxima campaña.