Si en la elite ya no se mueve el dinero de antaño, en categorías amateur
el golpe a las arcas de los clubes humildes ha sido todavía más severo.Esto
le ha ocurrido al Lora en los últimos ejercicios. La entidad ribereña, alternativa de ascenso a Tercera años atrás,
ha cambiado de filosofía este verano ante los problemas económicos que le azotaba, nutriéndose de fichajes de otro perfil. “El
equipo es joven, aunque está
tremendamente ilusionado. No hay nombres, salvo dos o tres (Ismael, Eloy, Enrique), pero sí humildad. El grupo humano es buenísimo”, declaró
Manuel Luque, entrenador loreño, añadiendo que:
“Dinero no hay. Dijimos que lo que hubiera, que apareciera. Vamos al día, se está trabajando muy bien y por ahora no hay ningún problema”.
Salvo los tres jugadores citados anteriormente, el resto de
las incorporaciones realizadas este verano se tratan de futbolistas jóvenes con ganas de progresar o jugadores de localidades cercanas, seducidos por un proyecto honesto y humilde, pero nada conformista
. Con una cantidad fija baja
, por cada punto que sumen los jugadores loreños se embolsan diez euros.Por ahora, pero siempre con los pies en el suelo,
la nueva apuesta está siendo positiva. “El equipo anda con ilusión y ganas. El trabajo se está refrendando, pero sabemos que
esto acaba de empezar. Solo quiero hablar de permanencia”, dijo Luque, que destacó el carácter mostrado por su equipo ante
La Barrera: “Fallamos un penalti y nada más saltar en el segundo tiempo encarrilamos el partido. Me gustó la mentalidad”.