Feliz, abrazando a antiguos compañeros y amigos, saludando a la prensa con plena cercanía y desbordado en ilusión. Así entró a rueda de prensa
Pablo Guede, nuevo entrenador del
Málaga CF. Ha cumplido su sueño a sus 47 años, dirigir al equipo de su vida. "Es mi reto más
apasionante. Es mucho lo que genera el Málaga, es mucha responsabilidad", rompía el hielo
el ex jugador y leyenda del club blanquiazul.
Emocionado en su presentación, el que fuera delantero y héroe en la época del ascenso a Segunda División expuso el motivo real para dejarlo todo por Málaga: "Los
sentimientos no se pueden manejar. Yo no le puedo decir que no al Málaga. Es difícil de explicar el sentimiento que tengo. En esta vida no todo es
dinero. Cuando te golpea el club de tus amores, hay que ir".
Las sensaciones del
nuevo dirigente con los jugadores son positivas. La predisposición por parte de los jugadores es máxima: "El primer entreno que dirigí vi a unos jugadores con una gran
predisposición. A partir de ahí, empezar a crecer en el día a día. De momento es todo bueno".
Pablo Guede llega solo a la Costa del Sol. Lo hace sin su cuerpo técnico y apostando por la gente de la casa. Como, por ejemplo, "el capi" Bravo, su segundo entrenador: "Lo quise así porque es el momento que toca. la gente de la casa está
súper capacitada. A Bravo lo necesito porque entiende y tiene
sangre blanquiazul. Creía que no era el momento como para venir con todo el cuerpo técnico. Estoy feliz de estar con ellos, es lo mejor. Es mi primera experiencia en Europa".
En Buenos Aires con su madre, a
Pablo Guede le pilló por sorpresa la llamada de Manolo Gaspar. No se lo esperaba, ni mucho menos, aunque no dudó en coger la llamada y decir "sí, quiero". "No la esperaba para nada. Estaba en
Buenos Aires con mi madre porque se cumplía un año del fallecimiento de mi padre, y no me lo esperaba. Siempre hubo
esperanza de esa llamada y cuando llegó no me lo pensé".
"Lo único que se le puede decir a la
afición es que intenten llenar
La Rosaleda, no puedo pedir más", decía en última instancia sobre la hinchada blanquiazul, la cual demostró su entusiasmo en redes sociales ante la llegada de Pablo Guede al banquillo malacitano en el momento más complicado de la temporada.