Eder Vilarchao, atacante del
Betis, ha tenido una temporada para olvidar, acumula ya
15 meses sin jugar al fútbol pero al fin, ya ve la luz al final del túnel. El joven canterano verdiblanco afronta la próxima pretemporada con la ilusión de ayudar al
Betis a subir a
Primera cuanto antes. "He pasado un año y tres meses durísimos, los peores de mi vida porque no he podido jugar al fútbol, que es lo que más me gusta. Últimamente muchas veces ya no tenía ni ganas de venir a entrenarme porque salía cojeando muchos días. Por fin parece que todo ha salido bien", comentó a los medios oficiales.
El verdiblanco sólo tiene en mente el momento de
volver a jugar en el Villamarín. "Debutar en el
Benito Villamarín fue la mejor sensación de mi vida. Llevo un año y medio sin poder repetirlo. Y lo he soñado muchísimas noches", dijo.
En todo momento, el canterano ha sentido el
apoyo del club pese a los momentos difíciles: "Debuté el 13 de enero de 2013 y ya antes se había hablado de la renovación. Me lesioné poco después y cumplieron lo que habíamos hablado antes. Se han involucrado en mi
lesión, lo que pasa es que por las circunstancias ha sido complicada. Yo me he ido desesperando, el club también. Pero al final hemos llegado a un acuerdo, ellos me han recomendado ir al mejor especialista, que es
Mikel Sánchez, y se ha podido solucionar todo. Estoy muy contento con ellos y creo que ellos también tienen que estarlo conmigo. Ahora esperemos que salga todo bien y pueda seguir jugando como yo quiero".
Su vuelta: "Para agosto. Esta mañana lo he estado hablando con Fran Molano y para agosto creo que estaré en perfectas condiciones ya. Aunque llevo un año parado veréis que soy un jugador que no coge kilos y me mantengo en buena forma. Lo que resta de junio y julio va a ser para ponerme bien físicamente y en agosto ya estaré al 100%".
Comprometido: "La lesión me ha ayudado en muchos aspectos. He madurado y más ganas que yo no va a tener nadie, ya sea en Primera o en Segunda. Yo lo que quiero es jugar y ayudar al Betis a recuperar la categoría y voy a estar involucrado, no al 100% sino al 200%".
Malos momentos: "Si hubiera tenido 30 años lo más seguro es que me hubiese rendido pero me pasó con 22 o 23, tenía toda la carrera por delante y como el fútbol es mi pasión no podía dejar de luchar. Al final parece que ha salido todo bien y la verdad es que estoy orgulloso de mí mismo".
Sin vacaciones: "No he puesto pegas. He sido yo el que he dicho que no quería vacaciones. Voy a coger esos días para ver a la familia y que me vea. Yo quiero estar trabajando y haciendo cosas aunque esté todo el mundo de vacaciones. Llevo un año sin jugar al fútbol y para mí ya han sido suficientes vacaciones".
Su posición en el campo: "Yo juego por detrás del delantero, de mediapunta, o cayendo a cualquiera de las dos bandas. Soy un centrocampista ofensivo. Me hubiese gustado demostrar más. En el filial sí he jugado algunos partidos buenos, en el primer equipo cuando debuté creo que lo hice bien pero sinceramente a mí me habría gustado haber demostrado más porque creo que tengo cualidades y mucho para dar al Betis. Espero que esta temporada pueda demostrarlo desde el primer día".