Gana la Copa y desciende en tres días

Gloria y miseria para 'Bob' Martínez

Gloria y miseria para 'Bob' Martínez
Roberto Martínez, del cielo al infierno en tres días. - Redacción
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 6 min lectura
Roberto Martínez disfrutó de sus días más felices con el Wigan, al que llevó a la cima con la conquista de la Copa de Inglaterra, pero unas cuantas horas después fue incapaz de evitar el descenso de la Premier, tras ocho años de asentamiento.

La 'FA Cup' disparó definitivamente la repercusión del técnico español. Un salvavidas con credibilidad en temporadas anteriores, experto en esquivar a última hora la caída de la categoría. Algo asumido por muchos como natural para este equipo de las afueras de Manchester.

El Wigan pagó el esfuerzo. Los cálculos fallaron, las energías mermaron y desapareció de la elite. El descenso, sin embargo, no aminoró en ningún caso la reputación de un técnico que ha crecido cada año.

La conquista del primer título de la historia del Wigan ha proyectado al entrenador español, que maneja varias opciones de futuro sobre su mesa. Además de la del Wigan, que pretende retenerle para la aventura europea del club, la del Everton es la que suena con más fuerza después de que David Moyes fuera elegido como sucesor de Alex Ferguson en el Manchester United.

Rafael Benítez también cumplió con nota su aventura en el Chelsea. Efímera pero fructífera. A pesar de las dificultades que encontró desde su llegada a Londres y la consideración de 'interino', el preparador madrileño salió airoso del tránsito por Stamford Bridge.

Llevó a su equipo a la conquista de la Liga Europa y le dejó tercero en la tabla de la Premier, superado solo por los dos equipos de Manchester, United y City, y con la clasificación directa para la próxima edición de la Liga de Campeones.

El tiempo terminó por dar la razón a Benítez, que contempla alentado el futuro tras su vuelta al fútbol inglés, donde disparó sus méritos como técnico.

Los entrenadores españoles dejaron su sello por el mundo en el curso que ahora se cierra. Miguel Ángel Portugal, Óscar García Junyent o Miguel González 'Michel', llevaron al éxito a sus equipos en distintos países.

Miguel Ángel Portugal hizo campeón de la Liga boliviana al Club Bolívar. El preparador, de 57 años, consiguió el primer título de su carrera como entrenador con el equipo más laureado de Bolivia, con el que ahora jugará la próxima edición de la Copa Libertadores de América.

Óscar García Junyent consiguió que el Maccabi de Tel Aviv recuperara el dominio de la Liga de Israel, que conquistó este curso después de diez años de sequía.

El Maccabi, donde también llegó Jordi Cruyff como director deportivo y que cuenta en su plantilla con los también españoles Carlos García y Gonzalo, ha tenido un trayecto impecable. Solo ha perdido cuatro partidos.

Michel salió al extranjero a mitad de temporada después de su desvinculación del Sevilla. La liga de Grecia fue su primer destino en el extranjero. Llegó al Olympiacos y logró el doblete. Selló la consecución del título de Liga con varias jornadas de antelación a pesar de que tomó las riendas de la plantilla con el campeonato encarrilado.

En la Copa ganó la final ante el Asteras Trípoli, equipo revelación del curso. El próximo año disputará con el conjunto ateniense la Liga de Campeones.

Lucas Alcaraz y Fabri González también disputaron la Liga de Grecia aunque no acabaron el curso. Lucas Alcaraz dejó el Aris Salónica para entrenar al Granada. Fabri fue destituido del Panathinaikos, que ha padecido una de las temporadas más grises de los últimos años.

En Bélgica, los preparadores de España han dejado su impronta. Juan Carlos Garrido ha llevado a Europa al Club Brujas, que ha disputado la liguilla por el título que conquistó el Anderlecht. Víctor Fernández llegó al Gante para evitar el descenso y está a un paso de clasificarle para disputar la Liga Europa.

En la segunda división belga, Bartolomé 'Tintín' Márquez llevó al Eupen al octavo puesto.

Otros técnicos han cumplido el ejercicio que acaba en distintas partes del mundo del fútbol. En Albania, Julián Rubio ha dirigido al Flamutari Vlore, cuarto en la tabla, mientras en los Emiratos Árabes han probado fortuna Quique Sánchez Flores, con el Al Ahli, Raúl Caneda, con el Al Ittihad y Antonio Amor, con el Al Wasl.

Juan José Maqueda disputó la liga egipcia con el Ittihad El Iskandary y Ramón Tribulietx con el Auckland City de Nueva Zelanda. Patxi Salinas probó fortuna con el Melita en la Liga de Malta y Antonio Ordinas con el Stabeek de Noruega.

Juande Ramos se ha asentado en el fútbol ucraniano. Mantiene en la parte alta al Dnipro. En Hong Kong trabaja Josep Gombau al frente el Kitchee y en la República Democrática del Congo Miguel Zurro con el Sant Eloi.

David Caballero dirigió al Bayamon en Puerto Rico y Jose Mari Bakero al Juan Aurich en Perú.
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