Fabio Quagliarella ya es jugador de la Sampdoria, habiendo sido recibido ayer por el presidente, Massimo Ferrero. El ariete italiano, a sus 32 años, llega cedido por el Torino, que ha incluido una obligación de compra de nueve millones de euros. Quagliarella, que firmará por año y medio, se había quedado sin sitio tras la llegada del ex sevillista Ciro Immobile, a la vez que el conjunto turinés se asegura, así, liquidez para el próximo verano, momento en el que podrían hacer frente a los 10-11 millones de euros que refleja la opción de compra de la que disponen sobre el nervionense.