Osasuna tiene hasta el 31 de julio para pagar
siete millones de euros y evitar el descenso a
Segunda B. El conjunto navarro acumula
deudas de la etapa de
Patxi Izco al frente de los rojillos, pero la más importante es la que mantiene con algunos futbolistas, ya que éstas pueden condenarle a un descenso de categoría que se uniría a la ya desastrosa situación con el equipo en
Segunda división.
Esta importante
necesidad condicionará mucho a la entidad navarra, ya que perderá fuerza en eventuales
negociaciones por alguno de los
futbolistas que tiene en plantilla y que querrá traspasar para hacer caja y para liberar unas fichas que serían demasiado elevadas en Segunda división. Entre estos casos se encuentran dos futbolistas que, como ya publicó ESTADIO, han estado en la agenda de
Monchi en las últimas temporadas. Son los casos del defensa central
Alejandro Arribas y del guardameta
Andrés Fernández.Ofrecen 2,5 millonesPor el zaguero madrileño, el
Sevilla llegó a ofrecer la temporada pasada hasta
2,5 millones de euros. El futbolista estaba convencido del traspaso, pero
Osasuna desoyó todas las ofertas que llegaron por un futbolista que había arribado libre una campaña antes señalando que no necesitaba vender a uno de sus pilares, un argumento que ahora se cae por su propio peso.
En el caso del
portero, el interés nervionense viene de más lejos aún, pero
Osasuna nunca se había planteado prescindir de un guardameta que ha estado en la agenda de los grandes. Sin embargo, su rendimiento ha bajado algunos escalones en las últimas dos campañas, si bien en el tramo final de ésta ha vuelto a recordar a su mejor versión.
Arribas y
Andrés son dos de los pocos futbolistas con los que
Osasuna puede hacer caja, además de por el punta
Oriol Riera, autor de 13 goles.