Aunque podría pensarse que el eje de la zaga sevillista ya tiene nombres y apellidos, con
Fede Fazio,
Daniel Carriço,
Nico Pareja y el regreso de
Alberto Botía, no está ni mucho menos descartado que pueda arribar un nuevo central a
Nervión. En este sentido, tal y como ha podido saber ED, la dirección deportiva ha realizado un seguimiento sobre el defensor holandés
Virgil Van Dijk, de 22 años. Un prometedor zaguero al que sus
193 cm de altura le convierten en un valor seguro en el juego aéreo, tanto en defensa como en ataque, aunque no está exento de técnica, como demuestra con sus desplazamientos en largo, supliendo además su falta de velocidad con una gran capacidad de anticipación y colocación. Cualidades que le han colocado en la agenda de poderosos pretendientes.
Tras dos campañas en la
Eredivisie, en las filas del
Groningen, el
Celtic pagó
tres millones de euros el pasado verano por su pase y le firmó un contrato hasta 2017, soñando con retenerlo al menos un año más pese al interés de varios conjuntos de la
Premier League inglesa, tal y como ha asegurado el técnico del club escocés,
Ronny Deila, por encima incluso de la llegada de nuevos fichajes: "Lo más importante es retener a nuestros jugadores".
El también holandés
Ronald Koeman ha solicitado su fichaje para el
Southampton y el
Newcastle incluso podría haber iniciado ya los contactos, aunque la gran amenaza para el
Celtic la representan el
Arsenal y, especialmente, el
Manchester United, con
Louis Van Gaal como gran valedor de este internacional sub 21 ´oranje´, que sí habría descartado la opción de marcharse a
Rusia, donde la pretende el
Dinamo de Moscú.
La competencia, por tanto, se presume dura, pero al contrario que en el seno del club católico, su agente sí espera movimientos durante el verano.
Monchi, mientras tanto, permanece al acecho, aunque para sacarlo de
Escocia habrá que rascarse el bolsillo, puesto que su precio rondaría los seis kilos.