La operación por Roque Mesa se ha convertido en el culebrón del verano en clave nervionense, con giros bruscos en las negociaciones, un cambio de opinión del presidente de Las Palmas cuando ya se habían cruzado los contratos o acusaciones al Sevilla de mal aconsejar al jugador.
Pese a todo esto, no es una vía totalmente cerrada, pues es la primera opción sevillista para la posición de pivote dinámico y hace tiempo que las diferencias económicas son salvables. Por ello, en Nervión no se ha descartado por completo al canario, aunque sigue siendo difícil.