El
Mundial de Rusia y ese teórico parón que había provocado en el mercado ya no son excusas para que el
Sevilla ultime, de una vez por todas, el fichaje de alguna de esas "opciones muy avanzadas" a la que
Joaquín Caparrós viene haciendo referencia en las últimas semanas. El propio director del área de fútbol admitió que la "prioridad" y "lo que más urge" es reforzar el centro de la defensa y esta semana debe ser clave en ese sentido.
Primero, porque la primera de las tres rondas previas que debe pasar para estar en la
Europa League queda a la vuelta de la esquina y, en segundo lugar, porque desde Madrid y en la prensa gala anunciaban ayer ofensivas sevillistas por
Dakonam Djené, del
Getafe, y
Alexander Djiku, del
Caen, los mejor situados a día de hoy.
También sigue estando en los primeros puestos de la agenda de
Caparrós el expupilo de
Machín en Girona,
Juanpe; a quien el club catalán tasa en
10 millones y cuyo precio llevan semanas intentando rebajar en Nervión, de momento sin mucho éxito.
Así las cosas, y tras descartar ya ir a por un
Caleta-Car que se ha encarecido,
Djené y
Djiku están en la 'pole'. El central azulón (26 años) no necesita presentación. Ya fue vinculado con el
Sevilla a inicio del presente verano y es una de las revelaciones de la Liga en la pasada temporada.
Hasta el momento,
Ángel Torres, presidente del Getafe, se había mantenido inflexible a la hora de negociar y se remitía a los 35 millones de su cláusula; pero en Eduardo Dato confían en que las facilidades que le han dado para fichar a
David Soria tengan una recompensa con
Djené.
Con todo, los clubes vendedores saben que el
Sevilla acaba de ingresar
35,9 millones de euros por
Lenglet y quieren su tajada. No hay central por el que pregunte el Sevilla que sea valorado por debajo de los 10-12 kilos.
Ese sería el coste de
Djiku (23 años). Acostumbrado a jugar en una defensa de tres en el
Caen, destaca por su poderío físico, su dominio del juego aéreo y su aseada salida de balón.