Maxi Gómez, tranquilo pese a ser tan codiciado

Es uno de los grandes objetos de deseo de la dirección deportiva nervionense, que busca un ‘9’ referencia para satisfacer a Machín. Pero a sus 21 años, y después de firmar 18 goles en su estreno en LaLiga, Maxi Gómez es consciente de que no le faltan ‘novias’, si bien se muestra comedido y se centra, por ahora, en un Celta que no lo piensa dejar marchar por menos de 25 kilos.

“Suenan nombres como Sevilla, Borussia Dortmund, varios cuadros ingleses... Pero estoy tranquilo en el Celta, intentando hacer las cosas bien y ojalá que vengan cosas mejores y seguir haciendo sueños realidad”, ha señalado el atacante uruguayo en su país, donde continúa de vacaciones tras la disputa del Mundial, “un sueño hecho realidad”, siendo casi diarios los homenajes recibidos en su localidad natal, Paysandú, el último de ellos por parte del Club Atlético Litoral, donde dio sus primeros pasos como futbolista.

En Nervión esperaban que tras su periplo en Rusia, el delantero apretase al club gallego para intentar rebajar su precio, pero lejos de eso, al menos públicamente, Maxi Gómez afirma tener los cinco sentidos puestos en su regreso a la disciplina celeste. “El día 30 arranco a entrenar, con la pretemporada que ya la están haciendo, toca ponerme las pilas para hacer un año mejor que el pasado”, destacó, admitiendo al mismo tiempo que no esperaba tan rápida eclosión en el fútbol europeo: “Me sorprendió, no me esperaba debutar y hacer todos los goles que hice en una liga tan difícil, para mí la mejor del mundo. Estoy muy agradecido a mis compañeros del Celta que lo hicieron posible”.