José Antonio Rivero3 min lecturaEl Deportivo Alavés se reenganchó a la lucha por el ascenso a Primera este sábado con una victoria ante el Tenerife (1-0), en un partido que tuvo de todo y que se cerró con un gol del portero Juan Soriano en propia puerta después de un remate de espuela de Jon Guridi.
A los 20 minutos llegó una de las polémicas del choque, que empezó a calentar el ambiente de un partido tranquilo hasta ese momento. Cordero Vega señaló penalti por falta a Nahuel Tenaglia, pero tras consultar el monitor del VAR anuló la pena máxima y amonestó al futbolista del Alavés.
Los vitorianos se animaron más cuando Luis Rioja entró en acción, pero les faltó claridad de ideas en los metros finales de una primera mitad descafeinada.
La segunda parte se fue calentando con los encontronazos entre Víctor Laguardia y Borja Garcés y Juan Soriano con Asier Villalibre. El partido se abrió y en cuestión de un minuto, ambos estrellaron el balón en el larguero.
El Alavés insistió y en una buena internada de Javi López en el minuto 69 llegó el premio. El canario la puso en el primer palo y Jon Guridi remató con la espuela para superar a Soriano, que no acertó a despejar y se la acabó metiendo en su portería.
Tuvo otras dos el Alavés en las botas de Luis Rioja y en un mano a mano de Asier Villalibre, pero el marcador no se movió más.
El público del Estadio de Mendizorroza fue crucial en la victoria de su equipo, llamando la atención un aficionado muy activo durante todo el partido y que captaron las cámaras de 'Movistar +'. El protagonista no era otro que Óscar Téllez, quien jugase ocho temporadas en el Alavés y fuera capitán blanquiazul, llegando a disputar la famosa final de la Copa de la UEFA ante el Liverpool.
Téllez abandonó el club de su vida, como él mismo lo catalogó, en 2006 y por sus diferencias con el por entonces propietario, Dmitry Piterman, que llegó a ser presidente y entrenador.
El central madrileño también contó en más de una ocasión como se arruinó cuando colgó las botas. "Por una mala gestión, me quedé sin nada y ahora trabajo en el aeropuerto de maletero", dijo en 2016. Pero si hay algo que nunca ha perdido Óscar Téllez es su amor por el Deportivo Alavés, algo que quedó claro este sábado, cuando se le vio en las gradas de Mendizorroza como uno más, disfrutando con el gol y el triunfo de su equipo.