Sampaoli no se llevó a Lillo a Argentina. - C. P.Carlos Pérez2 min lectura
Jorge Sampaoli llamó a Juanma Lillo para que se uniese a su aventura en la selección de Chile y, posteriormente, se lo llevó a Sevilla por el conocimiento que tenía el donostiarra de la Liga española, así como, sobre todo, por su cercanía con Pep Guardiola (el argentino deseaba sumar al vértigo bielsista la virtud de saber instalarse en campo rival en los ataques organizados, teniendo así alejado de su portería lo máximo posible al adversario).
Los caminos de ambos, sin embargo, se separaron a finales de mayo, cuando Sampaoli hizo las maletas y se marchó a su país, para dirigir a la Albiceleste. Allí se llevó a sus habituales colaboradores (Matías Manna, Jorge Desio...), excepto a un Lillo que se quedó en la capital hispalense, entre otras cosas, para seguir viendo en directo al filial.
Algún medio llegó a especular, incluso, con que Lillo podría ser el recambio del de Casilda en el banquillo nervionense, pero el segundo entrenador del Sevilla en la 16/17 se va a ir, según la prensa colombiana, al Atlético Nacional. En Medellín se da por hecho que esté lunes se irá Reinaldo Rueda, quede como que de su equipo en la última jornada de la Liga Águila, y que Lillo, que ya dirigió a Millonarios en 2014, se hará cargo del equipo a partir de entonces.
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