Jorge Sampaoli dejó la selección argentina tras caer en los octavos de final del
Mundial de Rusia. Entrenar a su país era su sueño, como repitió varias veces mientras entrenaba al
Sevilla en la temporada 16/17. De hecho, tras esa temporada, dejó al Sevilla cuarto clasificado y se marchó a cumpolir su sueño.
Ahora, poco más de un año después,
Sampaoli espera un
buen proyecto para regresar a
Europa. "Me tomé un tiempo para analizar mi proceso en la selección, para analizar el posMundial. Necesitaba este momento de análisis para sacar en claro cosas de cara a mi futuro. Estoy esperando básicamente un proyecto que me haga disfrutar de nuevo de mi trabajo de entrenador. Es decir, que yo pueda, desde el banquillo, general modificaciones en el equipo, colectiva e individualmente, como hice en todos los lugares donde estuve: Perú, Chile, Ecuador, Sevilla... Quiero volver a eso. Y por lo demás, miro mucho fútbol", ha reconocido en una entrevista a Marca.
Cuestionado, después de su convulsa etapa como
seleccionador argentino, sobre si se arrepiente ahora de haber dejado el
banquillo del Sevilla, Sampaoli lo acepta con naturalidad: "No, son pasos que uno ya dio. Es un lugar donde la pasé muy bien. La gente, cada vez que voy, me recuerda mi equipo. Siempre estoy pendiente de sus resultados. Tengo un gran recuerdo".
No descarta
regresar a
Europa, aunque tampoco alguna
selección, como la mexicana o la colombiana que actualmente no tienen un seleccionador fijo. "No tuve contactos con ninguna. Cuando me toque, debo elegir bien", asegura, aunque mientras tanto, se dedica a ver fútbol: "Me gusta el Chelsea de Sarri, el City de Guardiola, el Barça y el Madrid siempre... y el Betis de Setién es interesante. La Liga la veo bastante, también por el Sevilla. Le doy más prioridad a la Liga que a otras, pero trato de no perderme la Premier ni la liga francesa, ni la alemana, ni la Serie A. México tiene cosas atractivas, incluso el fútbol turco. Veo también al Leeds de Bielsa mucho".
Sobre si preferiría trabajar en un
club o en una
selección, 'Sampa' no tiene preferencias, aunque le seduce el trabajo de seleccionador: "Me gustaría estar cerca de los jugadores, pero una selección con chances de modificar cosas, como hice en Chile, también me seduce. Quiero analizar bien dónde ir".
En cuanto a la efusividad en la
celebración de
sus goles, el de Casilda asegura que no lo puede cambiar: "Soy así de natural, y siempre respeto a todos los rivales. En la Liga nunca fui expulsado y tengo una gran relación con los árbitros. Y quiero seguir siendo un tipo apasionado por el ataque, tratando de ser protagonista, como fue mi Sevilla, jugando de igual a igual contra cualquiera. Quiero un equipo que me haga disfrutar del juego que yo siento".
En una
reflexión sobre el fútbol actual,
Sampaoli explica: "Ahora hay muchos partidos, pero poco fútbol puro. Antes había menos encuentros, pero más juego. Siempre miro fútbol antiguo y moderno. Soy un fanático de éste deporte y termino viendo fútbol de todo el mundo. Sobre todo, el fútbol de ataque, el de posesión y el de presión. Me gusta eso y mi desafío es el mismo de cuando dirigía en Casilda o en Chile o en Sevilla: lograr que mis equipos jueguen ese estilo y ganen. Siempre me quedaré con el fútbol en el que se juega más de lo que se corre. De eso, Juanma Lillo es un embajador y maestro, al igual que los son para mí Menotti, Cruyff Y Guardiola".
Finalmente,
Sampaoli reconocía que cuando vuelva a trabajar, es muy probable que no lo haga con el mismo equipo de trabajo: "Todos están trabajando, incluido Juanma Lillo, que está con Iniesta en Japón. Estoy armando un nuevo equipo con la gente que quedó. Esperemos que pronto se dé".