Metidos de lleno en la
Navidad y con la ciudad adornada debidamente para ello, escribo gustosamente mi epístola a los
Magos de Oriente. Como suele ser habitual, este año también me he portado bien, por lo que, en un alarde de generosidad e ironía, gusto compartir mis deseos con los demás. Por eso, queridos
Reyes Magos, me gustaría solicitar para el presidente
José Castro y su consejo de administración un viaje a
Aracena, que está mucho más cerca que la
República Dominicana y, de camino, podrían comprarse entre todos un cerdito de barro. Por eso de echar un eurito cada uno todos los días y, al final de año, ahorrarse lo de la retribución del consejo. Un aspecto aprobado en la pasada junta, pero que a los socios parece no haberles convencido del todo. Y hablando de cerdos, un buen espónsor con Navidul, que lo mismo les soluciona algún que otro trofeo. Para
Del Nido, un diario. Por aquello de apuntar su día a día y ahorrarse de aparecer hablando de "retiro" y no de talego, o dando lecciones de cómo hipotecarse con un nuevo
Sánchez-Pizjuán. Ya quedó comprobado que de manejar dinero, entiende; eso nadie lo duda a día de hoy.
Para
Óscar Arias, por favor, no caer en lo sencillo y ahorrarse las corbatas por muy socorridas que sean. Determinación y un poco más de atino con el delantero, quizá, no le vendrían del todo mal. Por tanto, carbón, al igual que para
Muriel. Pero el de las chimeneas, no vaya a ser que le coja gusto al dulce. Para el 'Toto' Berizzo pido salud, y eso lo digo sin ironía ninguna. Pues empeño y profesionalidad le está poniendo, aunque es cierto que en lo deportivo está defraudando a la mayoría.
Pero no lo dejéis todo en
Nervión, que también hay que pasarse por
Heliópolis. Por allí, llevar los regalos contados, no vaya a ser que
Oliver se apunte también al reparto. Para
Quique Setién,
Rubén Castro y algún que otro fichaje más, que ese armario tiene poco fondo. La eterna juventud de
Joaquín y una mayor destreza de la planta noble con
Fabián. Un tablero de ajedrez, quizá, tampoco sería mala idea; seguramente mucho mejor que 'Creer. El desafío de superarse siempre', pues al cántabro le gusta leer, pero la biografía del 'Cholo' no creo que sea muy acertada.
No olvidarse del presidente
Haro, que es un poquito rencoroso, pero muy generoso. Lo que traigáis para él, a medias con
Catalán, y otro poquito para
Lopera y compañía. Tranquilo si no salen las cuentas, que ya otros la pagarán. Un chubasquero sería un acierto, pues el paraguas de
Serra no siempre es suficiente cuando los resultados no van de cara. Eso y un juego de escuadra y cartabón, que tomar al de enfrente como vara de medir resulta... de buen empresario, que lo es.
Y para mí, que todos reciban mis generosos deseos de buen agrado, que les inunde el ambiente navideño y que entiendan el tono de mi epístola. Que no se refieran en vano a mi progenitora y que, de no recibirlo de buen agrado alguno, se ahorren al menos el enfado o el toque.
¡Feliz Navidad!