Ninguno de los 10 delanteros con los que ha competido en Heliópolis mejoró sus números

La pólvora de Rubén Castro, sin rival en el Betis

La pólvora de Rubén Castro, sin rival en el Betis
Pasan los años y el rendimiento de Rubén Castro continúa siendo extraordinario en Heliópolis. - J. Julián Fernández S.
José JuliánJosé Julián4 min lectura
Desde 2010, Rubén Castro es sinónimo de gol en Heliópolis. Con 124 tantos, se ha convertido en el máximo artillero del Betis en toda su historia, siendo, además, quien ostenta el récord absoluto de más temporadas como principal anotador del equipo, encadenando ya seis de manera consecutiva (la anterior plusmarca era de Rincón, con cuatro).

Y precisamente este último dato ha provocado que el de La Isleta no haya tenido competencia en La Palmera. Tanto es así que de los diez futbolistas que han peleado con él por un puesto en el once inicial, sólo uno hizo carrera como verdiblanco. Se trata de Jorge Molina, que formó una sociedad prácticamente perfecta con el ‘24’. De hecho, entre ambos sumaron 211 ‘chicharros’ que sirvieron para celebrar dos ascensos (10/11 y 14/15) y una clasificación para Europa (12/13).

Al margen de eso, y de la aportación de un Pabón que firmó una espectacular segunda vuelta en la 12/13, el resto de delanteros que han pasado por Heliópolis lo han hecho con más pena que gloria. Algunos, incluso, se fueron casi sin haber jugado, como ocurrió con Damiao. Otros (Pereira, Braian Rodríguez, Chuli, Rennella y Van Wolfswinkel) se cansaron de ser suplentes. Y también hubo casos como los de Santa Cruz y Baptistao, quienes se quedaron muy lejos de las expectativas.

Ahora, con Sanabria y Álex Alegría como competencia, Rubén buscará seguir haciendo historia, aunque ya no tenga la ayuda de su fiel escudero Molina.

Todos sus compañeros de ataque
Jorge Molina
En el Betis se convirtió en el mejor socio posible para Rubén Castro. Firmó 77 dianas oficiales y en la 13/14 se quedó a sólo una de igualar el registro del ‘24’.

Jonathan Pereira
La aparición en escena del duo Castro-Molina le relegó a un segundo plano y a jugar caído en banda. El derbi del Pizjuán en la 12/13 precipitó su adiós al club.

Roque Santa Cruz
Tras varias campañas suspirando por su fichaje, la afición bética esperaba mucho más de él. Arrancó enchufado la 11/12, pero se diluyó demasiado pronto.

Dorlan Pabón
Su llegada fue todo un soplo de aire fresco para la delantera en enero de 2013. Aportó goles, movilidad y un gran entendimiento con la dupla Castro-Molina.

Baptistao
El altísimo coste de su cesión (1,6 millones), las expectativas que se crearon con su fichaje y el mal momento del Betis en la 13/14 le impidieron triunfar en Heliópolis.

Chuli
Pasar de Segunda a la Europa League fue un salto demasiado grande para él. Jamás se adaptó a la exigencia del beticismo y se vio obligado a hacer las maletas.

Braian Rodríguez
Apenas contó y cuando tiraron de él no supo aportar demasiadas cosas al equipo. Por ello, entró en un carrusel de cesiones que ha acabado con su rescisión.

Rennella
Empezó con fuerza su etapa como verdiblanco y parecía destinado a hacer carrera en el club. Pero fue un espejismo. Desapareció del once y no volvió a ser el mismo.

Van Wolfswinkel
Su fichaje sobre la bocina creó mucha expectación. Se esperaba que fuese el mismo del Sporting de Portugal, pero sólo ofreció contados destellos de su calidad.

Damiao
Su fichaje se coció a fuego lento y parecía destinado a aportar un plus al equipo. Pero al final llegó fuera de forma, lo que redujo su participación a sólo 128 minutos.
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