Encuesta

El beticismo se decanta por los resultados, no por el estilo

El beticismo se decanta por los resultados, no por el estilo
Bordalás, en el banquillo dle Betis. - A. S.
Alejandro SáezAlejandro Sáez 4 min lectura
"Resultados al margen..." argumentaba Quique Setién el pasado lunes, en la sala de prensa del Benito Villamarín, después de haber empatado a uno 'in extremis' frente al Espanyol por medio de Feddal. Una exposición que demostraba una vez más la confianza del técnico cántabro en su idea de fútbol, dejando al margen las numerosas críticas que viene recibiendo su equipo, especialmente en las últimas fechas, una vez que sume cuatro jornadas consecutivas sin conocer la victoria (tres derrotas y un empate). Frente al Espanyol, de hecho, se vio de manifiesto una vez más la fractura existente entre la grada y el cuerpo técnico, viviéndose la peor entrada de la temporada y siendo Setién objetivo de los reproches del beticismo durante todo el encuentro. 

Con la lucha por Europa prácticamente perdida, aunque las matemáticas aún se empeñen en decir lo contrario con tres partidos aún por disputarse, en Heliópolis ya piensan en la próxima temporada y ella, para los béticos, no pasa por Quique Setién. Ya lo han dejado claro en el Benito Villamarín, y aún más en las encuestas realizadas por este diario, evidenciando una vez más que el beticismo se decanta por los resultados, y no por la filosofía de fútbol que defiende su actual técnico. Una visión preciosista del balompié que, lógicamente, debe estar siempre supeditada al fin último de la práctica deportiva: ganar. De ahí que los planes de futuro, más allá de lo que estimen Haro, Catalán y Serra Ferrer, pasen por encontrar un recambio al cántabro en el banquillo, siendo José Bordalás y Joan Francesc Ferrer 'Rubi' dos de los entrenadores vinculados recientemente con el Betis. Dos estilos antagónicos que defienden justamente lo que se debate hoy en el Benito Villamarín. 

Bordalás, quien ha obrado el milagro con su Getafe, luchando por la cuarta plaza de LaLiga, con derecho a Champions, hasta estas alturas de la competición, es el máximo exponente del resultadísimo que se solicita en las gradas de Heliópolis. De ahí que un 67% de los encuestados por ESTADIO Deportivo se hayan decantando por el alicantino al ser cuestionado si les gusta para el Betis de la 19/20, negándolo el 33% restante.



Justo lo contrario a lo que ocurre con Rubi, quien promulga un estilo más continuista y afín a lo que hoy día es habitual sobre el césped del Benito Villamarín. Quizá, la transición más lógica, intentando perpetuar la idea que se comenzó a desarrollar dos temporadas atrás con el fichaje de Setién. El propio Rubi, sin ir más lejos, se declaró admirador confeso del fútbol de Quique Setién, argumentando lo difícil que es "aguantar en LaLiga y Europa". Una idea que, sin embargo, no acaba de convencer en La Palmera, donde, claramente, no quieren ver a Rubi en el banquillo verdiblanco el próximo curso. El 65% de los encuestados reconocen abiertamente que no les gusta Rubi para el banquillo del Betis; el 35%, sí.


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