Dos semanas para golpear y esperar

Los nuevos responsables de la planificación en verdiblanco, con Alexis Trujillo erigido en coordinador y los dos consejeros delegados cogiendo el toro por los cuernos mientras aterrizan Jesús Sánchez y Ángel Luis Catalina (para hacer funcionar el nuevo organigrama), mantienen estos días varias negociaciones abiertas con el fin de completar la primera parte de su encomienda.

Y es que restan dos semanas para que, aparte del ya oficializado Juanmi (que potenciará varias posiciones del ataque), lleguen refuerzos para las dos principales lagunas que se detectaron en la 18/19: el lateral izquierdo y la delantera. Así, el objetivo es que Rubi inicie el próximo 5 de julio la pretemporada con esos tres fichajes, quedando el resto de movimientos condicionado al resultado de la 'operación salida', con demasiados nombres subrayados.

Según ha podido saber ESTADIO Deportivo, en la planta noble del Benito Villamarín redoblan los esfuerzos para concretar las dos incorporaciones que restan, que supondrán el grueso de la partida presupuestaria, junto al primer plazo del fichaje de Juanmi (ocho millones, más dos en variables, en total).

La hoja de ruta trazada en la comisión deportiva pasa por reclutar a un artillero de referencia, un punta reputado que domine los balones aéreos y genere segundas jugadas, pieza clave en los esquemas de Rubi. Mitrovic era el primero en la lista, pero las complicaciones surgidas en la negociación con el Fulham y el firme deseo verdiblanco de que sea el siguiente en caer propiciaron que se abrieran otras vías, sin cerrar ni por asomo la del serbio. Borja Iglesias, que ha interpretado a la perfección los deseos de Joan Francesc Ferrer en el Espanyol, es la alternativa que ha cobrado más fuerza en las últimas horas, aunque no es la única.

Además, Álex Moreno es el carrilero zurdo que más gusta para competir con Junior o, llegado el caso, para relevarlo, con lo que llegaría otro más para esa demarcación. Hay acuerdo por cinco temporadas con el catalán, pero el Rayo pide la cláusula (18 millones) o una cantidad muy cercana a la misma. Clubes de la Premier League y la Bundesliga desean hacerse igualmente con el '7' franjirrojo, cuya prioridad, dentro de lo posible, es continuar en LaLiga.

Si Rubi, como se está intentando, puede contar en la primera semana de julio con los tres fichajes deseados (o, en su defecto, cuando esto se produzca), el Betis echará el freno. Y no sólo porque los fondos se habrían agotado, sino porque, dependiendo de que se marchen unos u otros de la columna vertebral, aparecerán nuevas carencias por cubrir. Será complicado, vista la subasta que han iniciado Tottenham, Manchester United y Atlético de Madrid (a la espera de que el Real Madrid y otros pudientes realicen su jugada), retener a Lo Celso, por el que no se aceptarán menos de 75 millones de euros.

En ese caso, en Heliópolis ya se remitirían a la cláusula del resto de futbolistas tentados, como Junior, Pau López, Canales, Mandi y el propio Camarasa, pues no habría necesidad de cuadrar más cuentas con los réditos que dejaría la venta del argentino, con una plusvalía muy generosa, una vez satisfechas las partes del PSG y Rosario Central.

Unos cuantos movimientos de menor calado (Brasanac, Boudebouz, Tosca, Narváez y acaso Inui) y pare usted de contar... salvo que alguno de los pretendientes de los efectivos más demandados abone el precio de su libertad unilateral: se reinvertirían los beneficios en sus sustitutos.