No ha sentado muy bien la designación de
Estrada Fernández en Heliópolis... pero tampoco en San Sebastián. El colegiado catalán tiene cuentas pendientes con ambos equipos que este domingo se enfrentan en el
Benito Villamarín. Con el
Betis fue clave en dos de los tres partidos que dirigió la pasada campaña y los donostiarras le acusan de haberles birlado, al menos, un punto ante el
Real Madrid en el tramo final de la temporada anterior.
Pero no sólo eso sino que sus números, al menos en lo que respecta al
Real Betis, son bastante negativos, pues sólo ha ganado 6 de los 19 partidos que le ha dirigido y suma hasta 10 derrotas. El pasado año resultó decisivo en la goleada bética en
Villarreal, cuando decantó el encuentro con un penalti más que dudoso, revisado por el VAR, que supuso el 2-1 para los de Calleja, clave en el devenir de aquel encuentro; como también resultó determinante que le perdonara la expulsión a
Thomas Partey en el
Betis-Atlético del mes de diciembre.
La
Real, por su parte, también le recrimina que en aquel 1-2 del Madrid ante los donostiarras anulara un gol a Januzaj por
fuera de juego posicional de Mikel Merino, además de otras dos jugadas dudosas, en las que siempre favoreció al equipo capitalino.
Este domingo tendrá una difícil papeleta de contentar a dos equipos que no guardan muy buenos recuerdos de él.
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