Poco más de 72 horas después de superar otra ronda copera, el Betis se juega acabar la primera vuelta con un aprobado alto. Para ello debe ganar al Celta, que llega después de ver frenada su gran racha y de sufrir dos goleadas en menos de una semana, la primera de las cuales significó su eliminación de la Copa.
Los vigueses llegarán con la importante baja de Iago Aspas y enfrente les espera un Betis que ha visto en los últimos días cómo se le vaciaba la enfermería. Como dijo Manuel Pellegrini el domingo, "bendito problema" poder elegir entre 25 en lugar de tener lo justo para formar un once y hacer los cambios.
Eso también hará que regresen algunos de los habituales, que no habían estado por alguna circunstancia en las últimas jornadas.
Éste podría ser sobre el césped del Benito Villamarín.