El Bayer Leverkusen llegará muy tocado al partido del jueves. No ha ganado en sus cinco últimos partidos y, con tres derrotas y dos empates, se ha alejado de la cabeza en la Bundesliga y ha visto cómo un Segunda lo eliminaba de la Copa alemana. Por si fuera poco ha ido sumando bajas desde que se enfrentara hace dos semanas al Real Betis.
Ya tenía la ausencia importante del mediocentro chileno Aranguiz y a ellos sumaba en los últimos días las del extremo Bellarabi -rotura muscular- y el delantero centro checo Schick -ligamento de su tobillo izquierdo- Ambos no volverán a jugar hasta después del parón de selecciones. El primero se encargó de volver loco a Miranda y a Alex Moreno en el Villamarín; y el segundo es el máximo goleador del equipo en la Liga alemana con 8 tantos y dos asistencias en 9 partidos.
Pero a ellos se ha unido uno más tras el duelo del pasado fin de semana ante el Wolfsburgo. Se trata del carrilero zurdo Mitchel Bakker, que se retiró tocado a poco del final y las pruebas médicas han confirmado que sufre un edema óseo en el tobillo izquierdo. El ex del PSG tampoco podrá estar ante el Real Betis.
Gerardo Seoane tenía pensadas hacer algunas rotaciones, pero la falta de efectivos le obligará a repetir con jugadores que no llevan una buena dinámica y tienen muchos minutos en sus piernas últimamente.
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