Es una oportunidad. Con las limitaciones intrínsecas a una cita en el Camp Nou, en las que salir airosos forma parte de la excepción, pero con la certeza de dispone de argumentos en un contexto con matices favorables.
La inercia positiva y el impulso por las cuatro victorias consecutivas juegan a su favor contra un Barcelona inmerso en una dinámica diametralmente opuesta, y en Nervión creen en que pueden regresar a casa con el liderato reforzado, aunque a sabiendas de que necesitarán alcanzar la perfección y que los azulgranas se alejen de ella.
La hazaña precisa máxima concentración y exprimir las virtudes que ha mostrado en su racha triunfal en Liga, sobre todo la efectividad en sus llegadas y la intensidad y el orden en la contención.
Sólo con la excelencia se puede contrarrestar a Messi y hoy la buscará para ejercer de líder.
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