Susana Díaz, consejera de Presidencia y favorita como sucesora de Griñán, avanza hacia la victoria sin ningún tipo de obstáculo en el camino. Por otro lado, sus rivales, el consejero de Agricultura, Luis Planas, y el alcalde de Jun (Granada), José Antonio Rodríguez,
se enzarzan en una pelea que podría acabar por llevarles a los tribunales.
Ambos aspirantes consideran ilógico que la CGE (Comisión de Garantías Electorales)
haya aceptado sus precandidaturas sin mayores formalismos (se anunciaron por Internet) y que ahora rechace la
validez de los avales recibidos por correo electrónico, aunque se trate de la documentación original escaneada.
También se quejan de que el PSOE no materialice
el compromiso asumido en su XXXVIII Congreso respecto a la rebaja del 15 al 10% de los avales para ser candidato. Denuncian, además, que la Comisión se niegue a facilitar el censo, escudándose en el reglamento.
La CGE afirmó ayer que estas peticiones quedan fuera del ámbito de sus competencias, ya que suponen "un cambio en las normas vigentes aprobadas por los órganos regionales y federales".
Planas y su equipo intentarán encontrar una solución
por la vía del entendimiento antes de pasarse a la judicial, pero es complicado, ya que necesita el apoyo tanto de Sevilla como Madrid.
Rodríguez, el candidato granadino, explica que la Comisión
sólo acepta los avales en sobres, y se queja de que, en la red, él "ya superaría sin problemas el mínimo requerido". Admite que aún no ha tratado con Planas el poder crear un frente común en los tribunales, pero sí reconoce que "
sus quejas son las mismas".
Ajena a todo esto,
Díaz viajó a Jaen para firmar un acuerdo con la Diputación y reclamó, después, "unidad" en la reunión extraordinaria del Comité Provincial de Sevilla.
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