Los Williams se ponen serios

El pasado fin de semana volvimos a vivir un episodio de racismo en el fútbol español. En esta ocasión fue en el Cívitas Metropolitano, cuando un aficionado del Atlético de Madrid profirió los sonidos de un mono al futbolista del Athletic Club Nico Williams. El extremo español, como todos recordarán, no dudó en parar el partido y avisar al colegiado para advertir de la situación, que ha vuelto a poner en cuestión el protocolo de LaLiga y la necesidad de actuar con más energía y determinación para erradicar este tipo de comportamientos.

El aficionado en cuestión ya ha sido identificado por la Policía y una vez acabe el proceso judicial, pues también será denunciado, será despojado de su condición de socio del Atlético de Madrid de por vida, un castigo ejemplar ante una situación sobre las que los hermanos Williams volvieron a reflexionar anoche con motivo de su visita a 'La Resistencia' de Movistar+.

"Da pena que pasen estas cosas todavía a día de hoy, La verdad es que me hicieron el sonido del mono, pero yo más que por mí miro por el lado de los más indefensos. Al fin y al cabo, yo soy futbolista, algo que siempre he soñado ser, pero igual para los chavales y la gente que está más desprotegida es peor", dijo el menor de los hermanos.

Además de poco el foco en los más indefensos, su hermano Iñaki, también lo hizo en en los niños pequeños, que al fin y al cabo son los que aprenden las conductas de las personas mayores: "Ese es el verdadero problema, al final nosotros somos ídolos para muchas personas, para muchos niños, somos referentes. Vamos al campo de fútbol a hacerlo lo mejor posible. Yo no voy al teatro y se me ocurre insultar a cualquier persona".

También recordó el mayor de los Williams que hay que ser un ejemplo para los más pequeños en este sentido y educarlos en la igualdad. Una reflexión que levantó el atronador aplauso del público del programa dirigido por David Broncano: "Parece que en el fútbol todo está permitido y, en realidad, transmite valores más positivos que ir al campo de fútbol a desahogarse. De hecho, son los miles de millones de niños que les gusta practicarlo, que les gusta ver a sus ídolos y creo que el mayor ejemplo es intentar cortar esto de raíz, poner multas ejemplares y que no se permitan estas situaciones".