Su etapa como director deportivo de la
Federación Ecuatoriana de Fútbol no ha sido muy larga, pero a
Antonio Cordón le dio tiempo a
monitorizar a un buen número de
talentos del país. Apasionado de la
cantera, el extremeño siguió de cerca las evoluciones de jugadores jóvenes que podían dar el salto a la selección absoluta del país centroamericano, uno de los cuales ha pasado de promesa a realidad a lo largo de
2020. Y eso que su andadura en el vecino país de
Perú arrancó con críticas, aunque la vuelta a la actividad en tierras andinas ha confirmado el enorme momento de un
polivalente atacante.
Se trata de
Washington Corozo (22), extremo zurdo aunque diestro de pie que está a punto de cerrar el año con
8 goles y 14 asistencias en 29 partidos oficiales (de Apertura, Clausura, Play Offs, Final por el título ganada y Libertadores), unas cifras que, según 'Todofichajes.com', habrían llamado poderosamente la atención de dos equipos de LaLiga: el
Villarreal, que suele pescar al otro lado del charco con acierto (desde la presencia allí de Cordón), y el
Betis, que cuenta en su dirección general deportiva con alguien que conoce bien al de Guayaquil.
Internacional ecuatoriano
sub 20 y cerca de estrenarse con los mayores, Corozo tiene contrato por tres años más con el
Sporting Cristal, que lo compró en enero de 2020 a
Independiente del Valle por 650.000 euros al cambio. Una cifra que ha amortizado de largo y que podría doblar o triplicar en una hipotética salida al mercado del delantero. Como ya se ha advertido, el Betis está muy limitado por el
tope salarial, por lo que necesita vender y rebajar su masa de sueldos, entre otras cosas para hacer hueco en el plantel.
La condición foránea de Corozo obligaría a los verdiblancos a liberar una de sus tres
plazas extracomunitarias (ocupadas por
Emerson, Guido Rodríguez y Lainez), aunque no sería mayor problema, incluso si el mexicano se niega de nuevo a salir cedido. Y es que el pivote argentino ha conseguido ya su
pasaporte italiano, por lo que un último trámite le permitiría ser 'europeo' a efectos burocráticos durante el mes de enero sin complicaciones, una documentación que se retrasó más de lo esperado por la pandemia.