La segunda jornada del año en
División de Honor ha significado el final de la primera vuelta en e
l Grupo I, un primer tramo de campeonato en el que los ocho conjuntos sevillanos se encuentran en los polos de la tabla, una polarización de la que se salva la
UP Viso, en la novena plaza.
Las diecisiete jornadas de
División de Honor han deparado a un Castilleja campeón de invierno, objetivo, a priori, que no se encontraba entre los planes al inicio del curso. El equipo dirigido por Alejandro Ceballos, que vivió una profunda remodelación de la plantilla del pasado ejercicio, ha firmado su mejor primera vuelta de la historia, una de las mejores conclusiones para el balompié sevillano de esta primera vuelta, aunque bien cerca del Antonio Almendro se encuentra la otra revelación: el Tomares de Nacho Molina.
El joven preparador aljarafeño está haciendo historia en el cuadro del San Sebastián. Logró el ascenso a División de Honor el pasado año y esta temporada ha llevado a su equipo al subcampeonato invernal, dejando claro que ya no van de farol, convirtiéndose en uno de los aspirantes al ascenso a Tercera.
La principal conclusión desde el punto de vista sevillano es la polarización de esta primera vuelta, con varios equipos luchando por ascender y la mayoría por salvar la categoría.
Respecto a la zona noble, el Cabecense es el tercer sevillano que cierra el cartel, por ahora, de aspirantes. El conjunto dirigido por Manuel Luque es cuarto, a cinco puntos del descenso.
El único conjunto que se salva de esta dicotomía es la UP Viso de Alfonso Lozano. Primera vuelta de montaña rusa para los alcoreños, que si bien comenzaron con una alineación indebida, alcanzaron el liderato.
No obstante, finalizan la primera vuelta con dudas y en la novena plaza.
Las peores noticias, sin duda, llegan de la zona baja, con cuatro sevillanos en las últimas cinco plazas. Decimocuarto, pero fuera de descenso, por ahora, está el nuevo Torreblanca de Raúl Carmona. San José (15º), Alcalá (16º) y Algabeño, colista, sí están en el pozo, aunque los tres con vida, incluido un decepcionante cuadro algabeño, a cuatro puntos de la salvación.