Saúl Ñíguez, fichaje imposible

Saúl Ñíguez vivió este verano uno de los capítulos más insólitos de su carrera. El centrocampista ilicitano, que abandonó definitivamente el Atlético de Madrid tras más de una década, estuvo a punto de firmar por un equipo turco antes de acabar recalando en el Flamengo. Una operación que, según su propio director deportivo, se cerró de madrugada y con Saúl literalmente dentro de un jet privado.

Y es que el fichaje del que fuera jugador del Sevilla la pasada temporada por el Flamengo, fue cualquier cosa menos convencional. El propio José Boto, director deportivo del conjunto brasileño, ha desvelado en una entrevista con Record los entresijos de una negociación que calificó como “la más difícil” de toda su carrera. Y no es para menos: tuvo que sacar al exrojiblanco de un vuelo privado que lo iba a llevar a Turquía para firmar con el Trabzonspor.

“Tengo muchas historias curiosas, algunas no puedo contarlas, pero puedo contar una aquí en el Flamengo. Saqué a Saúl Ñíguez de un vuelo privado de un club turco que ya pensaba que lo tenía hecho. Eso me dejó sin dormir”, confesó Boto, que aún recuerda la tensión de aquella madrugada.

El dirigente explicó que todo ocurrió en plena diferencia horaria entre Europa y Brasil. “Eran las cinco de la tarde en España, y justo después de un partido tuve que pasarme toda la noche despierto para cerrar el trato. Lo conseguimos cerca de las cinco de la mañana, hora brasileña”, relató.

Del Trabzonspor al Maracaná

Saúl había rescindido su contrato con el Atlético de Madrid, que lo vinculaba hasta 2026, y ya llevaba semanas escuchando ofertas. Turquía parecía su destino hasta que el Flamengo irrumpió con una propuesta imposible de rechazar. “Logré sacarlo de un jet privado que el club turco le había proporcionado”, reveló Boto.

No fue la única negociación complicada que vivió. “A lo largo de mi carrera he tenido muchas historias así, pero esta fue la más difícil. Emerson Royal estaba con el Milan haciendo la pretemporada en Malasia, y hablaba con Furlani, su director deportivo, en horarios completamente diferentes. Necesitaba documentos y no me contestaba porque estaba dormido”, recordó entre risas.

Rendimiento inmediato

Pese a llegar algo tocado físicamente, Saúl se ha adaptado rápidamente al fútbol brasileño. Filipe Luis, su antiguo compañero en el Atlético y ahora entrenador del Flamengo, ha confiado en él desde el primer día. “Estas cosas son increíblemente estresantes, pero ahora son buenas historias que contar”, cerró Boto.

Hoy, el ilicitano disfruta de su nueva etapa en el Maracaná, convertido en una pieza clave de un Flamengo que no solo ganó un jugador experimentado, sino también una historia digna de película.