Confirman conversaciones por João Félix
João Félix se acerca al Benfica en un regreso cargado de nostalgia y dificultades económicas. El técnico del club luso reconoce su deseo por ficharle, pero con condiciones
El atacante portugués João Félix parece tener los días contados en el Chelsea, y todo apunta a que este verano cambiará de aires en busca de un entorno donde recuperar su mejor versión.
De vacaciones en EE. UU. y lejos del Mundial de Clubes
Mientras su actual club disputa el Mundial de Clubes, João Félix se encuentra en Estados Unidos... pero de vacaciones. Ni siquiera presenció el partido del Chelsea ante Los Ángeles FC, prefiriendo asistir al emocionante empate entre Benfica y Boca Juniors (2-2) en el Hard Rock Stadium. Un gesto con un mensaje claro: su corazón sigue ligado al club donde se formó como futbolista.
Tras un paso discreto por el AC Milan en calidad de cedido, el delantero de 25 años estaría dispuesto a regresar al Benfica, el equipo que lo catapultó al estrellato mundial. Fue allí donde bajo el mando de Bruno Lage, el joven de Viseu explotó todo su talento, firmando 20 goles y 11 asistencias en una única temporada antes de ser vendido al Atlético de Madrid por 127 millones de euros en 2019.
El Benfica lo quiere… pero hay obstáculos
El propio Bruno Lage, actual técnico del club lisboeta, ha sido claro respecto a una posible vuelta de João: “Hay deseo, sí, pero también hay que considerar el aspecto económico. João debe entender que en Portugal no se pueden pagar salarios como los que recibe en Inglaterra”. Con contrato vigente hasta 2031 con el Chelsea y una ficha anual superior a 10,5 millones de euros, la operación parece compleja.
La única vía viable para el Benfica sería una cesión con condiciones asumibles o un traspaso por un porcentaje de sus derechos. Lage insiste en que “ambas partes deben ceder”, subrayando que, aunque hay interés mutuo, el delantero necesita adaptarse a las limitaciones económicas del fútbol portugués si realmente desea volver a casa.
Di María se despide y Otamendi ilusiona
Mientras tanto, otra figura importante del Benfica, Ángel Di María, afronta sus últimos partidos con el equipo antes de regresar a Rosario Central, su club de origen. El argentino fue clave en la remontada ante Boca, marcando de penalti el primero de los dos goles del empate. Nicolás Otamendi, también argentino y autor del segundo tanto, demostró su liderazgo celebrando con euforia ante la afición rival.
Di María expresó su frustración por no debutar con victoria en el Mundial de Clubes, y apuntó directamente al arbitraje: “Permitió muchas patadas. Si hubiese sacado tarjetas al principio, habría sido un partido más limpio”.
Con Benfica en la segunda plaza del grupo, detrás del Bayern Múnich, el objetivo inmediato del equipo es claro: clasificarse a la siguiente ronda, mientras sueñan con el regreso de João Félix, el niño prodigio que nunca fue olvidado.