Maresca dice basta

El técnico del Chelsea, Enzo Maresca, expresó con dureza su malestar por las constantes suspensiones de partidos en el Mundial de Clubes debido a las tormentas eléctricas que afectan a Estados Unidos.

“Esto no es fútbol”: el duro alegato de Maresca

La victoria del Chelsea ante el Benfica por 1-4 quedó eclipsada por una situación fuera de lo deportivo: el choque fue interrumpido en el minuto 85 por una tormenta eléctrica y se reanudó tras dos horas de parón. Maresca, molesto por el impacto de estos parones en el desarrollo del juego, no se mordió la lengua: “Si ya son seis o siete encuentros interrumpidos, esto se convierte en un chiste. Entiendo que hay que priorizar la seguridad, pero si pasa constantemente, este no es el lugar adecuado para organizar un torneo así”, lanzó el italiano en rueda de prensa.

Un problema que se repite

La suspensión del duelo entre los 'Blues' y el club portugués no ha sido un caso aislado. Ya van seis partidos detenidos por las inclemencias meteorológicas. El primer afectado fue el enfrentamiento entre Ulsan Hyundai y Mamelodi Sundowns, y desde entonces las tormentas eléctricas se han vuelto una constante.

Así funciona el protocolo climático

Según el reglamento, los árbitros deben detener el partido si se detecta riesgo de rayos a menos de 8 millas del estadio. A partir de ese momento, el juego se suspende un mínimo de 30 minutos. Si se escucha otro trueno dentro del rango, se reinicia el conteo. Además, los aficionados deben evacuar las gradas y refugiarse en zonas seguras.

Impacto mental y físico

Maresca también criticó la pérdida del ritmo competitivo: “Durante 85 minutos fuimos superiores, dominamos sin conceder ocasiones. Pero luego de la interrupción, el encuentro se transformó completamente. Los jugadores perdieron el enfoque. Algunos se relajaron, comieron, hablaron con sus familias… Es imposible mantener la concentración en esas condiciones”.

A pesar de la clasificación del Chelsea a los cuartos, el entrenador subrayó su preocupación: “Es una competición fantástica, pero este tipo de parones rompen por completo la esencia del fútbol. No es normal. En un Mundial o en Europa, ¿cuántos partidos se suspenden? Ninguno. Aquí llevamos seis en solo dos semanas”.

Mensaje final: “No me malinterpreten”

Antes de terminar, Maresca quiso aclarar su postura: “No se trata de una crítica gratuita. Estoy feliz de seguir en el torneo, pero si seguimos con tantas interrupciones, hay algo que no funciona. Como entrenador, mantener al equipo mentalmente enfocado durante dos horas de espera es una tarea casi imposible”.

La organización del Mundial de Clubes deberá tomar nota si quiere evitar que las condiciones meteorológicas sigan empañando el espectáculo.