José Antonio Rivero3 min lecturaLa sorprendente dimisión de Luis Rubiales como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha generado una serie de especulaciones sobre las razones detrás de su decisión. Entre las teorías que circulan, se encuentra la idea de que Rubiales habría sido presionado por el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, para renunciar a su cargo. Esta presión, según fuentes citadas por la Cadena SER, se habría ejercido debido a la preocupación de que la continuidad de Rubiales como presidente de la RFEF pudiera afectar negativamente la candidatura conjunta de Europa y África para albergar el Mundial 2030.
El anuncio de la dimisión de Rubiales incluye una referencia directa al Mundial 2030, donde explica: "No quiero que el fútbol español pueda resultar perjudicado por toda esta campaña tan desproporcionada y, sobre todo, tomo esta decisión tras haberme asegurado de que mi marcha contribuirá a la estabilidad que va a permitir que tanto Europa como África sigan unidas en el sueño de 2030, que permitirá traer a nuestro país el mayor evento del mundo". Esta declaración sugiere que Rubiales podría haber sentido que su permanencia en el cargo podría perjudicar la candidatura conjunta de Europa y África para organizar el Mundial 2030.
La dimisión de Rubiales también ha afectado a su puesto en la UEFA, ya que el comunicado menciona que "también le he informado de que he hecho lo mismo con mi cargo en UEFA para que mi puesto en la Vicepresidencia pueda ser sustituido". Esto indica que Rubiales ha tomado medidas para asegurarse de que su renuncia se extienda a nivel internacional y que su puesto en la UEFA quede vacante.
La presión ejercida por Ceferin, según las fuentes citadas, podría estar relacionada con el temor de que la controversia en torno a Rubiales y su posible implicación en el expediente abierto por la FIFA debido a su comportamiento en la final del Mundial femenino pudiera afectar la imagen y la credibilidad de la candidatura para el Mundial 2030. La continuidad de Rubiales en la RFEF podría haber sido vista como un obstáculo para los intereses de la UEFA en esta cuestión.
En resumen, la dimisión de Luis Rubiales como presidente de la RFEF ha generado especulaciones sobre las razones detrás de su decisión, sobre todo porque quizás hubiera podido evitar problemas con la justicia de haber dimitido antes. En esta situación destaca la importancia de la política y los intereses internacionales en el mundo del fútbol, donde las decisiones a nivel nacional pueden tener repercusiones globales.