Tres años del mayor cambio en la historia del Almería

“Su excelencia Turki Al-Sheikh, magnate de Arabia Saudí, se ha convertido en el nuevo propietario de la UD Almería al haber adquirido todas las acciones de Alfonso García Gabarrón, que poseía el 96% de la sociedad. Después de varios días de intensas gestiones, a primera hora de la tarde de este viernes se ha procedido a la firma del traspaso de poderes en una notaría de nuestra capital”.

Así comenzaba las historia de amor entre Turki y la UD Almería. Así lo quiso transmitir el club en su web oficial. Tras salir de la notaría junto a Alfonso García, Turki se hacía dueño del conjunto almeriense por una cifra de la que muchos titubean. Mohamed El Assy declaró hace unas semanas que lo hizo por unos 18 millones de euros.

Sea como fuere, la primera temporada del jeque a los mandos del club se caracterizó por una gran inversión eso sí. Esto se tradujo también en una pasarela de entrenadores. Pedro Emmanuel y José María Gutiérrez estuvieron al frente del primer equipo en ese primer años. Turki mientras tanto se reunía con varios personajes del mundo del fútbol de nuestro país para saber más de cómo funciona el fútbol en España. El equipo acabó cuarto y cayó en los playoffs frente al Girona.

Durante la pandemia, el presidente rojiblanco se mostró muy comprometido con la ciudad de Almería. Turki donó 500.000 euros para la lucha frente al COVID, un gesto que hizo meterse más aún a los aficionados indálicos.

En su segundo año y con José Gomes a los mandos, el Almería seguía teniendo en mente el ascenso a Primera división. En el mercado de verano se contrató a un delantero nigeriano, de nombre Umar Sadiq, del que nadie había escuchado hablar de él antes. Hoy se ha convertido en el fichaje más caro de la historia del club y es todo un ídolo de la afición. Se lo ha ganado a base de goles y Turki no podría haber hecho mejor inversión que en su fichaje.

A pesar de ello, tras destituir al portugués y contratar a Rubi, el equipo cayó en los playoffs de nuevo ante el Girona. Sin embargo, Turki siguió apostando por el técnico catalán y a la vista están los resultados.

El 29 de mayo de este mismo año, la UD Almería ascendía a Primera división tras siete años vagando por Segunda. Una categoría en la que han vivido de todo, hasta el punto de estar cerca de descender más aún a Segunda B.

Sobre el césped de Butarque celebró Turki como un aficionado más el ascenso de su equipo. Estuvo en la grada en lugar del palco y llevaba puesta la camiseta del equipo. El jeque ya forma parte de la historia del Almería y sus sueño va más allá aún. Esto solo acaba de empezar.