La incertidumbre que generó
el despido de Serra Ferrer y el paso al '
Big Data' ha dado paso a una moderada satisfacción tras el cierre de un plantilla que
ha mejorado en la gran carencia que tenía, el gol, y que queda con
dudas en la portería y, sobre todo, en la necesidad de contar con
un medio de cierre potente que mejore a Javi García, que complemente a
William Carvalho y que dé mayor equilibrio en defensa al equipo.
Con esa debilidad detectada, tendrá que manejar sus piezas con inteligencia Rubi para que todo el potencial ofensivo del equipo no se pierda con debilidad atrás.
De hecho, en el balance estadístico de las tres primeras jornadas, el Betis es
el equipo más goleado junto al Villarreal (8 tantos en contra) y
el que más remates a puerta concede.
La calidad de Fekir, su profundidad y su espíritu ofensivo (dos goles en tres partidos), ha aportado un salto de calidad gigante al ataque porque tiene más mordiente que Lo Celso. El francés va a ser, sin duda, el gran referente de un Betis en el que Borja Iglesias eleva el listón de cara al gol. Su llegada, de hecho, ha activado la competencia con la que
ha mejorado Loren (3 goles, a gol por partido). También se espera mucho de la movilidad y el olfato goleador de Juanmi, quien sólo ha disfrutado de siete minutos.
En la portería se ha bajado un escalón. Aunque Joel puede hacer olvidar a Pau, a Dani Martín se le ha detectado la lógica falta de experiencia de un portero que está por hacer y que irá creciendo a la sombra de Joel. Pedraza y Álex Moreno tienen virtudes para hacer olvidar a Junior, aunque tanto ellos como Emerson en el lateral diestro tendrán que aplicarse en defensa para no abrir vías con tanta facilidad a los rivales.
Serra dejó una base muy buena y las salidas de Pau, Junior, Lo Celso, Camarasa e Inui (en total 8 ventas y las rescisiones de Alegría y Tosca) han permitido realizar 6 fichajes.
Plantel hay para volver a Europa, más aún en un año con el único desgaste de la Liga y la Copa.
Le toca a Rubi seguir ajustando piezas para que el Betis marque más y encaje menos.
Joaquín Adorna
