Cuatro diplomas para España. Ése ha sido el balance de las cuatro opciones de medalla con las que el conjunto hispano se presentaba hoy en las finales de piragüismo de los Juegos Olímpicos de Tokio. Los españoles rozaron el pleno en semifinales, de las que sólo se cayó Isabel Contreras, pero se quedaron a las puertas del podio en la última instancia.
Los que más cerca estudieron fueron Antía Jácome en C1 200 y Carlos Arévalo en la final del K1 200 metros, con sendos quintos puestos, mientras que Paco Cubelos e Íñigo Peña fueron sextos en K2 1000 y nuestro abanderado Saúl Craviotto fue séptimo en la misma final que Arévalo.
Precisamente, las mayores esperanzas estaban puestas en Craviotto, que buscaba igualar las cinco medallas de David Cal, pero no ha salido bien una vez más y se ha quedado rezagado y sin opciones. En la misma carrera, el gallego Carlos Arévalo sí ha podido estar delante, pero no ha podido pelear finalmente por el podio.
La también gallega Antía Jácome, de 21 años y debutante en una cita olímpica, se mantuvo en la lucha por las medallas en una carrera explosiva y apretada para finalmente entrar en quinta posición (47.226), a solo 1,294 segundos de la ganadora de la prueba (45.932).
Los últimos en competir fueron Paco Cubelos e Íñigo Peña, en el K2 1000 metros. El talaverano y el guipuzcoano partían con opciones de subir al podio por su condición de actuales subcampeones del mundo, pero han salido un tanto rezagados y su reacción final no les ha valido y han quedado lejos de los metales.
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