Se acabó la crisis a domicilio del Sevilla FC, que pasó por casi todos los estados de ánimo en el Ciudad de Valencia, como demuestra el repaso fotográfico a un partido que permite a los de Julen Lopetegui olvidar la remontada postrera del Real Madrid en el Ramón Sánchez-Pizjuán y, de paso, atacar de nuevo la segunda plaza, que fue suya durante casi toda la primera vuelta. Aprovechó el conjunto blanquirrojo los tropiezos de Atlético de Madrid y Betis, entre otros, para restaurar sus opciones de Champions. Además, dejó en nueve las salidas consecutivas sin celebrar una victoria, que debe servir como bálsamo en Eduardo Dato.
Ya desde el inicio se notó la superioridad nervionense, con un equipo 'enchufado' y consciente de la fórmula idónea para hacer daño a un cuadro grandota igualmente urgido, aunque en este caso por acabarse el tiempo para seguir soñando con la permanencia. Los de Julen Lopetegui estuvieron concentrados en defensa, más allá de algunos chispazos locales, aplicándose en la presión para robar balones cerca del área de Dani Cárdenas y resolver, después, con velocidad. Pensar rápido y ejecutar aún más deprisa fueron las consignas blanquirrojas, con el Levante corriendo detrás del balón.
Como de costumbre, Ocampos fue de los más activos del Sevilla, convirtiéndose en protagonista con un buen disparo a la media vuelta y, sobre todo, con las dos asistencias al 'Tecatito', eficaz en la definición para apagar la tímida reacción grandota, fruto de una acción a balón parado que terminó con gol anulado a Vezo, aunque el infortunio de Diego Carlos, que rozó el balón con la mano justo antes (en el centro de Radoja a su compañero) cuando caía al césped, volvió a regenerar el fantasma del VAR.
En la reanudación, el partido se volvería loco, con el anfitrión a la desesperada y el Sevilla buscando una contra que diera la tranquilidad definitiva. Como no llegó, Morales tuvo el empate, de nuevo de penalti, pero su fallo dio alas a un cuadro hispalense que parecía respirar con el cabezazo a la red de Koundé. Nada más lejos de la realidad: una doble relajación defensiva forzó el 2-3 y un despiste en el despeje de Bono casi cuesta dos puntos. Al final, los tres volaron para la capital andaluza, donde la apuesta por la segunda plaza está más viva que nunca.
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Villa Gómez3 min lectura
