"Las casas de apuestas suponen un antes y después en el fútbol"

"Las casas de apuestas suponen un antes y después en el fútbol"
Aranda ha sido uno de los cabecillas de la trama que ha sacudido al fútbol español - Mario Gómez
Mario GómezMario Gómez 6 min lectura
La 'operación Oikos' ha sacudido todo el panorama del fútbol profesional en España. Un escándalo de considerable magnitud que ha salpicado a directivas de Primera, como la del Huesca, y a numerosos jugadores comprados por una organización liderada por Raúl Bravo y Carlos Aranda, exfutbolistas de varios equipos profesionales y que coincidieron en el Real Madrid Castilla.

¿Cómo hemos llegado a este punto y qué grado de complejidad tienen estas organizaciones criminales? En ESTADIO hemos hablado con el abogado Ángel José del Pino Ibáñez del despacho de abogados IN DIEM, que considera que "la entrada de las casas de apuestas en España suponen un antes y un después"en la historia del fútbol.

En pocos años, el fenómeno de las casas de apuestas se ha popularizado, especialmente la apuesta online. Esto ha llevado a un cambio en el paradigma de los amaños, según del Pino. "Al principio, cuando se producían amaños de partidos, estaban completamente relacionados con la clasificación", señala el abogado. "Había equipos que supuestamente intervenían y no pagaban directamente a jugadores por dejarse ganar, sino que premiaban a un equipo para que ganase a otro. Esto es lo que se conoce como las primas, que estaban unidas puramente al resultado clasificatorio". Sin embargo, ahora se ha abierto una nueva ventana de posibilidades de amaño que "no tienen por qué influir en el resultado final del partido". "Se pueden ver afectados otros aspectos del juego como córners, faltas", dice del Pino.



Sin embargo, la posibilidad de ganar dinero fácil ha tentado a muchos, tradicionalmente jugadores de categorías no profesionales que no disponen de un alto salario. La 'operación Oikos' ha supuesto el primer caso serio de amaños por apuestas deportivas en Primera división. Del Pino señala que, conforme a su salario, "las cantidades que ganarían los jugadores por el amaño no son tampoco muy altas", pero que "el beneficio real del amaño más bien tiene que ver con lo que los propios jugadores apuestan, pues pueden ver sus ganancias multiplicadas. En este sentido, la ganancia es doble".

La 'operación Oikos' también tiene "un signo diferencial" con las dos anteriores investigaciones por amaños, las 'operaciones Pizarro y Cortés'. En estas dos operaciones, los fondos de inversiones asiáticos eran los principales líderes de la trama, pues compraban a los jugadores directamente. Uno de los grandes problemas para los implicados era que podía darse el caso de que el amaño fuera un fracaso después de "la inversión del fondo económico que había detrás y de todos los familiares o conocidos que habían apostado, por lo que se producían unas grandes pérdidas de dinero. Entonces los intermediarios, que quedaban en deuda, supuestamente seguían proponiendo más amaños para subsanar sus deudas, entrando en un círculo vicioso".

Las investigaciones apuntan a que la operación Oikos tiene un carácter "más puntual". "Aún no se conoce quién está detrás del amaño de los partidos, aún no se sabe si había un fondo financiero que pusiera el correspondiente dinero para alentar el amaño. Presuntamente la organización se basaba en pactos de jugadores con directivos, un elemento diferencial. El 'modus operandi' de la operación Oikos parece que, a priori, no tiene nada que ver con las dos anteriores. Lo esencial aquí es tener la capacidad económica para poder amañar el partido y disponer de una estructura", cuenta del Pino.

Estas organizaciones articuladas para el lucro mediante el amaño de partidos y las apuestas son "fácilmente detectables" para la Policía. "Hay estadísticas que indican cuáles son los niveles de inversión normales en un partido sin amañar", cuenta del Pino, que dice que "estos niveles se disparan" cuando se produce un amaño. "Además de las propias organizaciones o fondos de inversión, las personas que de una forma u otra se encuentra implicadas en el amaño, tanto intermediarios como jugadores, proceden a apostar también. Los 'tipsters' (expertos en apuestas digitales) y toda la gente que se dedica de forma profesional a apostar, al advertir variaciones poco habituales en las apuestas de un partido, suelen aprovechar y proceden a invertir".

"Cuando esto sucede, el Servicio de Control de Juegos de Azar inmediatamente lo advierte", remarca del Pino. Este departamento de la Policía lo notifica tanto a las propias casas de apuestas, que suspenden el partido amañado de su servicio, y a los propios investigadores. "Es absurdo que las personas que amañan un partido no sean conscientes de que, más tarde o más temprano, esa sospecha de amaño se va a producir. Para evitar esta intervención, estas inversiones también se realizan en el mercado asiático donde el control sobre las apuestas es prácticamente inexistente. Lo lógico es que si la trama tiene una cierta estructura, no inviertan en casas de apuestas europeas y sí asiáticas" concluye Del Pino.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram