La
Gala de los Laureus 2013 se llevó a cabo la noche pasada
en Río de Janeiro como preludio del gran acontecimiento que se llevará a cabo en la
Cidade Maravilhosa dentro de tres años. Estos Óscar del deporte han tenido como
principales protagonistas a los premiados por su labor individual:
Usain Bolt, que consiguió el que es su tercer premio, y
la británica Jessica Ennis, que aparecía por primera vez entre los más grandes después de proclamarse
campeona olímpica en el heptatlón de Londres y recibir la medalla de la Orden del Imperio Británico (CBE).
Otro de los deportistas que brilló con luz propia anoche fue
Michael Phelps, que recibió el
premio especial Laureus por sus hazañas en la piscina. El de Baltimore había mostrado el
contraste entre los focos que le apuntan cada vez que sale en público y la penosa situación de miles de niños brasileños,
visitando por la mañana la favela de Rocinha, donde dio una clase práctica a los jóvenes y repartió medallas conmemorativas del encuentro.
En el plano de combinados,
el equipo europeo de Ryder Cup se hizo con el galardón. Capitaneado por José María Olazábal, el conjunto europeo fue reconocido por la épica que mostró el pasado septiembre con la remontada en la última jornada de la Ryder y
pudo brindar el premio a uno de las leyendas de este equipo en un pasado no muy lejano,
Severiano Ballesteros. Entre los derrotados en esta categoría estaba la selección española de fútbol, así como los Miami Heat o el Red Bull Racing de Sebastian Vettel.
Andy Murray, en la categoría de
mejor revelación; el considerado como mejor atleta dominicano de la historia,
Félix Sánchez (mejor reaparición); el brasileño
Daniel Dias como
mejor atleta paralímpico;
y Félix Baumgartner, mejor deportista de acción, fueron los otros triunfadores de la noche. En el camino se quedaron figuras de la talla de Lindsay Vonn, Serena Williams, Ernie Els o Messi.
La Fundación Laureus volvía a mostrar su
enorme capacidad de organización y su aspecto humano, ya que uno de sus objetivos es
utilizar el deporte como herramienta de inclusión social y, en particular, mejorar la vida de los niños en todo el mundo. Para ello tiene en su nómina a un
nutrido grupo de exdeportistas y personajes ilustres que llevan a cabo la
labor de embajadores. De hecho, ayer era nombrado como uno de ellos
Vicente Del Bosque, quien se une a otras estrellas como Lennox Lewis o Thomas Muster.
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