No es casualidad que el
Barcelona no haya perdido ningún partido de
Liga, lo que resalta la importancia del punto sumado en el
Sánchez-Pizjuán, pero el haber desperdiciado un sinfín de ocasiones claras de gol, y con el mejor jugador del mundo,
Messi, en contra, es muestra inequívoca, también, de que la victoria se esfumó más por demérito sevillista que por mérito culé. Sin un 'killer' es imposible, y más si el rival es el
Barça de Messi.Vincenzo Montella optó por la solución natural y suplió al sancionado
Sarabia con el palaciego
Jesús Navas, que volvía de lesión. El argentino
Gabriel Mercado ocupó el lateral derecho y
Kjaer, que poco a poco va convenciendo al italiano, acompañó a Lenglet en el centro de la retaguardia. El resto, un once base con
Luis Muriel en punta, en busca de su potencia y velocidad al ataque, contra un
Barcelona sin
Messi (partió desde el banquillo) al que el italiano quiso arrebatarle la posesión de la pelota. Un planteamiento acertado que salió a las mil maravillas hasta el 88'. Presionando arriba (gracias a un excelente trabajo del
'Mudo' Vázquez) y saliendo rápido con el balón,
Montella buscó la espalda a la contra a los de
Valverde, que intentaban dormir el partido con su fútbol y rompían, principalmente, por la izquierda. Y así llegó la primera culé, en el 3', después de que
Coutinho rompiera la línea de presión sevillista y
Luis Suárez le partiera la cintura a
Kjaer hasta en dos ocasiones. Sería
Iniesta, con la izquierda (por suerte), quien le metería el miedo a un Sergio Rico que con los pies no es
Ter Stegen, mientras que
Luis Suárez, luego, cruzaría en exceso otro balón.
Pero el Sevilla se había enfundado el traje de las grandes noches y sostenido por
Banega y un
Nzonzi a la altura del duelo, le jugaba de tú a tú a todo un
Barcelona que echaba de menos a
Messi y solicitaba una mayor participación de Iniesta. Pero claro, de nuevo volvía a aparecer la falta de gol y así, imposible. En el 12´, Correa tardaría demasiado en acomodarse el esférico y
Sergi Roberto salvaría un balón que
Nzonzi y
Navas, con una sensacional jugada, habían conseguido meter en el área. Fue
Muriel, minutos después, quien no consiguió cabecear en el área chica un córner en el que
Jordi Alba bien pudo hacer penalti.
Correa (que cabeceó demasiado picado) y
Muriel, en el 21', desaprovecharían nuevamente una doble ocasión blanquirroja, siendo el
'Mudo' Vázquez, en el 36´, quien finalmente conseguiría abrir el marcador, no sin que
Coutinho, con un tiro lejano, y
Umtiti, a falta de Iniesta, metieran antes el miedo en las carnes de
Sergio Rico. Es decir, demasiado esfuerzo para tan poco rédito: una contra sevillista que el
'Tucu' Correa bien supo pinchar en el área y que acabó en un inteligente remate del '
Mudo', solo en el área. Pese a ello, el 1-0 en el luminoso hacía justicia y
Montella veía recompensado el esfuerzo de los suyos, muy solidarios y atentos durante los 90 minutos.
Tras el paso por vestuarios, el italiano dio entrada a
Layún por
Mercado, habida cuenta de que el
Barça, cuando entraba, lo hacía por ahí y que el argentino tenía amarilla. Un intento por evitar que el armazón se acabara viniendo abajo, como finalmente ocurrió.
Muriel, con ayuda de
Umtiti, (50´) hacía el 2-0 después de que
Ter Stegen repeliera un lanzamiento de
Escudero. El partido se ponía de dulce, pero el
Sevilla, sin gol, perdonaba en exceso, y en el 55' veía escapar la ocasión más clara, quizá, de matar el partido:
Navas, solo, protagonizaba un cara a cara que
Ter Stegen supo tapar bien y que
Piqué acabó salvando bajo palos, siendo el '
Mudo', al rechace, el que no atinó posteriormente a rematar entre los tres palos.
Y así fue.
Messi entró en juego a la hora de partido y el
Barça comenzó su asedio, no sin que los de
Nervión gozaran de múltiples ocasiones a la contra:
Muriel, en repetidas veces,
Layún, Navas... El
Sevilla buscaba sin fortuna el tercero y los peores augurios estaban cerca de confirmarse. En un alarde de controlar el partido, Montella le dio entrada a
Pizarro por
Correa, mientras que
Nolito supliría a
Navas, con molestias. Pero al encuentro le sobraría los instantes finales y
Suárez, en el 88', empujaría con todo el balón a la red. Un minuto después,
Messi agarró un balón en la frontal y le pegó con la zurda a media altura y al palo largo de
Rico, haciendo el empate a dos. Adiós a una victoria revitalizante, hola a un sufrido empate que hará estragos en el físico de cara al martes. ¡Que suene el himno de la
Champions!
- Ficha técnica:
2 - Sevilla: Sergio Rico; Mercado (Layún, m.46), Kjaer, Lenglet, Escudero; Nzonzi, Éver Banega; Jesús Navas (Nolito, m.82), Franco Vázquez, Correa (Pizarro, m.72); y Muriel.
2 - Barcelona: Ter Stegen; Sergi Roberto, Piqué, Umtiti, Alba; Rakitic, Paulinho (Denis Suárez, m.76), Iniesta (Paco Alcácer, m.82), Coutinho, Dembélé (Messi, m.57) y Luis Suárez.
Goles: 1-0, M.36: Franco Vázquez. 2-0, M.49: Muriel. 2-1, M.88: Luis Suárez. 2-2, M.88: Messi.
Árbitro: José Luis González González (Comité Castellanoleonés). Amonestó a los locales Mercado (m.34) y Sergio Rico (m.44).
Incidencias: Partido de la trigésima jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante ceca de 38.000 espectadores.