Ben Yedder ha ofrecido esta temporada una lección de cómo rentabilizar las oportunidades y de una profesionalidad de manual, con la reivindicación siempre sobre el verde, a base de goles que nunca le han servido para disponer de la continuidad que ha merecido.
Le ocurrió ayer mismo, pues, después de abrir el marcador contra el Real Madrid, Caparrós decidió partir con Sandro como referencia arriba, lo que, una vez más, no menoscabó la confianza del franco-tunecino, que entró al borde del descanso y cambió el sino del partido.
No en vano, le ofreció más opciones a la vanguardia, con sus desmarques de ruptura y la primera ocasión de la que gozó terminó dentro, merced a su olfato goleador y capacidad para maximizar la más mínima duda en la zaga bética. Luego, WBY regaló una 'delicatessen' con el tacón para asistir a Kjaer en el 1-2, convirtiendo un córner de Banega en un magistral pase de gol. 'Pichichi' sevillista, lo hizo todo bien y merece que se le valore en su justa medida.
Álvaro Palomo1 min lectura